Gruma, el principal fabricante de harina de maíz en México, anunció este miércoles que entre enero y septiembre pasados logró ganancias por mil 261 millones de pesos, que contrastaron con las pérdidas por 717 millones de pesos en el mismo periodo del año pasado. El resultado, que es medido en moneda nacional, estuvo determinado por el efecto de la devaluación del peso ocurrida el otoño pasado, dado que la mayor parte de sus ingresos los capta en moneda extranjera por sus operaciones en el exterior.

El regreso a las utilidades ocurrió después de un año en que la crisis financiera que estalló el año pasado en Estados Unidos provocó que Gruma se viera forzada a asumir pérdidas, que fueron ocasionadas por haber realizado inversiones en instrumentos financieros altamente especulativos. La empresa aseguró ayer que el proceso de restructuración de sus pasivos, que en total llegaron el 30 de septiembre pasado a 919 millones de dólares. El pasivo total de la empresa creció 59 por ciento en el último año.

En el tercer trimestre de este año, Gruma realizó ventas con valor de 12 mil 566 millones de pesos, 12 por ciento más que en el mismo lapso de 2008. El volumen de productos vendidos fue de un millón 85 mil toneladas, con un crecimiento anual de uno por ciento.

Así, en el periodo obtuvo una utilidad neta de 45 millones de pesos, mientras entre julio y septiembre del ejercicio previo asumió una pérdida por mil 765 millones de pesos.

Gruma factura 73 de cada 100 pesos de sus ventas en el extranjero, de tal forma que la devaluación de la moneda nacional –de 30 por ciento respecto del tipo de cambio de agosto de 2008– la favorece en sus registros contables, al obtener una mayor cantidad de pesos por sus ventas en moneda extranjera.

Efecto de la devaluación

En un informe de sus resultados publicado ayer, la empresa mencionó que el incremento en el valor de sus ventas netas en el tercer trimestre se debió al efecto de la devaluación del peso mexicano y a un aumento en ventas de GIMSA, una de sus subsidiarias.

Para el periodo comprendido entre enero y septiembre, las ventas netas de Gruma fueron de 37 mil 943 millones de pesos, 19 por ciento más que en el mismo lapso de 2008. Las utilidades netas en los tres primeros trimestres de este año sumaron mil 261 millones de pesos, que contrastaron con pérdidas por 717 millones de pesos en 2008, añadió la empresa.

Gruma Corporation, subsidiaria del consorcio en Estados Unidos –y su principal fuente de ingresos–, hizo ventas por el equivalente a 5 mil 959 millones de pesos, uno por ciento menos que entre julio y septiembre de 2008.

En Grupo Industrial Maseca (GIMSA), que reúne las operaciones en México, las ventas netas fueron de 2 mil 615 millones de pesos, 13 por ciento más que en el tercer trimestre de 2008. Según explicó la compañía, el aumento fue resultado primordialmente de incrementos de precios durante el primer trimestre del año y en septiembre de 2009 y, en menor grado, de mayores volúmenes de venta.

Mientras tanto, las operaciones en la filial Gruma Venezuela reportaron en el tercer trimestre de este año ventas por el equivalente a 2 mil 354 millones de pesos, que significaron 4 por ciento menos que en el tercer trimestre del año previo.

En Gruma Centroamérica las ventas alcanzaron 737 millones de pesos, una caída anual de 11 por ciento.