Salvador de Bahía, 20 de noviembre. El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, llamó este viernes a Israel a detener de inmediato la construcción de nuevos asentamientos judíos en Cisjordania y aceptó mediar en el conflicto de Medio Oriente, durante una visita de Estado de su homólogo palestino Mahmoud Abbas.

En el contexto de la firma de un acuerdo de cooperación tecnológica entre Brasil y la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Lula advirtió: “de seguir construyendo en Jerusalén ocupada –ciudad a la que calificó de capital de los palestinos–, eso significa que Israel estará complicando la paz, poniendo obstáculos al camino de la paz”.

Luego de solicitar el desmantelamiento de las 900 casas cuya edificación autorizó esta semana el gobierno israelí en Cisjordania, el mandatario brasileño recordó que este acto viola las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y del llamado mapa de ruta.

Una paz justa y duradera en la región, aseveró Lula, depende del establecimiento de un Estado palestino compacto, sin restricciones, que garantice la seguridad de Israel y tenga respetados sus derechos y los de su población.

De esta forma, el sudamericano accedió a la petición de Abbas de fungir como mediador en el conflicto histórico con Israel. Brasil quiere ayudar a construir la paz en Medio Oriente, la paz y estabilidad que interesan a la humanidad, y todo lo que interesa a la humanidad no es ajeno a nosotros.

El líder palestino –quien se encuentra en Brasil como parte de una gira que también lo llevará a Argentina, Chile, Paraguay y Venezuela– también solicitó a Lula que convenza al mandatario iraní, Mahmud Ahmadinejad (quien llegará a Brasilia el próximo lunes), de que cese la ayuda a la organización Hamas en la franja de Gaza, según fuentes diplomáticas citadas por Afp.

Irán apoya a Hamas con dinero. Espero que (Lula) pueda decirle (al mandatario iraní) algunas cosas respecto de lo que ocurre en Medio Oriente, declaró Abbas en una entrevista publicada por el diario local Folha de Sao Paulo.