Policías querían implicar a senadores y AMLO con el movimiento
Miércoles 25 de noviembre de 2009, p. 13
Oaxaca, Oax., 24 de noviembre. Tres años después de su detención, César Mateos Benítez, seguidor de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), reveló que fue torturado por un militar y policías estatales para que implicara a los senadores electos Gabino Cué Monteagudo y Salomón Jara Cruz, así como al ex candidato a la Presidencia de la República Andrés Manuel López Obrador, en el financiamiento del movimiento magisterial y popular.
“Me decían: ‘confiesa, cabrón, que te dan 200 mil pesos cada mes para que pagues a quienes están en las barricadas’”, señaló.
Mateos Benítez fue aprehendido la noche del 24 de noviembre de 2006 por agentes de la entonces Policía Ministerial del Estado y luego internado en el reclusorio de Miahuatlán de Porfirio Díaz. Posteriormente en la prisión federal de San José del Rincón, Nayarit, y por último en la cárcel de Cuicatlán, Oaxaca, donde salió libre en junio de 2007.
El ex vocero de la APPO sostuvo que su captura, sin orden de aprehensión, ocurrió alrededor de las 20 horas, cuando viajaba en un auto junto con su compañero Jorge Luis Sosa Camposrumbo a San Bartolo Coyotepec.
Se nos emparejaron dos camionetas sin placas, en las cuales iban unos 12 policías armados. Subí el vidrio y le puse el seguro, pero un policía joven rompió el cristal con su pistola y me encañonó. Pidió que me bajara y al salir me puso de espaldas. Me esposaron y luego me colocaron una bolsa de tela negra en la cabeza. De ahí, calculé por el tiempo de traslado y el recorrido, nos llevaron a la Procuraduría General de Justicia del estado, donde nos golpearon y torturaron
, resaltó.
Expuso que en los separos uno de sus torturadores lo quería obligar a firmar una declaración en la cual él denunciaba a Cué Monteagudo y Jara Cruz, así como a López Obrador y a la dirección nacional del PRD, de financiar a la APPO.
“Como me negué, me golpearon mucho. Recuerdo que me decían ‘a ver, cabrón, firmas o te vamos matar. Lo único que tienes que decir es que Gabino, Salomón, López Obrador y el PRD te dan 200 mil pesos cada mes y tú pagas 200 diarios a los de las barricadas.’
En caso contrario, que señalara los domicilios de Flavio Sosa y Zenén Bravo, así como la oficina de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos. Les dije que tampoco podía hacer eso, y me pusieron una bolsa de plástico. Cuando me estaba desmayando por el sofocamiento, me echaron una cubeta de agua. Entonces, me tiraron al piso sobre una franela mojada y me dieron toques eléctricos en pies y nariz
, expresó.
En la tortura, subrayó, también participó un hombre que se identificó como militar y una mujer que aparentemente era la entonces procuradora general de Justicia, Rosa Lisbeth Caña Cadeza.