Luego de recibir la Presea Sor Juana Inés de la Cruz, máximo galardón de la Universidad del Claustro de Sor Juana, el editor independiente Jorge Herralde, director de la firma catalana Anagrama, que cumple 40 años de fundada, dijo en conferencia de prensa: He cambiado yo, ha cambiado el mundo, pero el proyecto editorial no.

Más adelante respondió a La Jornada la pregunta de por qué las grandes editoriales comerciales se empeñan en publicar demasiados títulos, muchos con vida efímera en las preferencias de los lectores, debido a la exigua calidad literaria: “Están obligadas por los gastos de su estructura administrativa, ya que necesitan una rápida recuperación. Son sellos como grandes almacenes, donde, sobre todo, se encuentra lo más barato; pero también tienen rincones con ejemplos de calidad. Eso genera que el lector no pueda confiar.

Frente a ellos hay otros modelos, como Anagrama y otras editoriales. Nuestra idea ha sido la persistencia y que los lectores capten el mensaje de que se les ofrecen escritores de calidad, que por estar en Anagrama ya es un elemento de confianza.

Al hablar sobre los grandes grupos editoriales que muchas veces publican a escritores sólo en su país de origen, explicó que a ellos los mueve un pesimismo inteligente, mientras a sellos independientes, como Anagrama, un optimismo de la voluntad.

Tras una pregunta acerca del atraso en la publicación del reglamento de la ley del Libro en México, la cual se retrasó algunos años debido a frenos del gobierno de Vicente Fox, el editor sólo comentó que en Europa esa legislación ha sido fundamental para beneficio de los escritores, editores, libreros y lectores.

Antes, en el ex templo del claustro, donde aún permanece la ofrenda de muertos que cada año se pone en honor de la Décima Musa, Herralde recibió la presea y un diploma de la rectora Carmen Beatriz López-Portillo.

Luego de las participaciones de la rectora, la vicerrectora Sandra Lorenzano; la presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Consuelo Sáizar, y del escritor Daniel Sada, Herralde destacó la figura de Sor Juana, agradeció el reconocimiento, dijo sentirse abrumado y agregó que el trabajo del editor es alentar, hacer pública la palabra ajena.

Sada, autor de Anagrama, reconoció de ésta una política editorial que no se doblega ante las exigencias del mercado, y de Herralde habló sobre la dignidad de un editor que conserva íntegros sus ideales literarios.

Entre el público estaban escritores como Margo Glatz y Sergio Pitol, uno de los pocos autores latinoamericanos que cuenta con más de 10 títulos publicados en Anagrama, y amigo cercano del galardonado.