Los trabajos durarán un año, pero no se suspenderá el servicio, señala Bojórquez
Se detectaron 58 puntos muy críticos, que no ponen en riesgo la seguridad de los pasajeros, dice
Viernes 11 de diciembre de 2009, p. 34
La línea A del Metro, que corre de Pantitlán a Los Reyes, será nuevamente intervenida, al detectarse 58 puntos muy críticos
donde existen diversos tipos de oquedades, grietas y hundimientos diferenciales, informó el director del Sistema de Transporte Colectivo (STC), Francisco Bojórquez Hernández. Señaló que el servicio, que es utilizado diariamente por 380 mil personas, no será suspendido.
En entrevista explicó que en la segunda quincena de diciembre se iniciarán los trabajos de rehabilitación, como la inyección de polímeros ligeros en las interestaciones de Santa Martha-Los Reyes y Peñón Viejo-Guelatao, para ver el comportamiento de la vía de manera dinámica con el paso de los trenes y del subsuelo, y realizar los ajustes necesarios para compactarlo y lograr su nivelación
.
El costo total de los trabajos ascenderá a mil 150 millones de pesos, de los cuales en la segunda quincena de diciembre se ejercerán 28 millones, provenientes de ahorros por la cancelación o aplazamiento de proyectos, reprogramación de pasivos y buenas ofertas presentadas en los procesos de licitación. Indicó que por eso es importantísimo el incremento de la tarifa, porque esta obra no puede esperar”.
Detalló que la aprobación de esa propuesta por la Asamblea Legislativa significaría un ingreso adicional para el organismo de mil 400 millones de pesos anuales, y podría asignarse una parte a este proyecto de rehabilitación de la línea A.
Agregó que los trabajos durarán cerca de un año, pero no implicarán que se suspenda el servicio en las 10 estaciones de esa línea, como se había planteado en un principio, pese a los hundimientos diferenciales de entre dos y 30 centímetros.
Precisó que durante ese lapso únicamente se cerrarán dos o tres fines de semana, debido a la existencia de puntos muy críticos
, que no ponen en riesgo la seguridad de los usuarios, pero sí obligan a bajar la velocidad.
El funcionario dijo que hubo necesidad de reprogramar tres meses el inicio de los trabajos, para concluir la licitación multianual, así como los estudios de mecánica de suelos, y evitar una mayor presión al presupuesto de la ciudad,
Señaló que la incorporación de la tecnología de inyección de polímeros ligeros permitirá mantener el servicio normal del Metro en la zona oriente de la ciudad de México.
Su implementación facilitará además la colocación de balastros, la alineación de la vía, el relleno de oquedades, la rehabilitación de las partes electromecánicas y la instalación de fibra óptica, que permitirá al Metro monitorear en tiempo real cualquier movimiento en la línea y atender de inmediato la aparición de grietas, derivadas de la heterogeneidad de los materiales y los problemas geológicos en la zona.
Con estas obras se garantizará que la línea no requiera de una cirugía mayor
los próximos 30 años, destacó el funcionario.