La elaboración de una propuesta de reforma política de los diputados del PRI, distinta a la de los senadores, volvió a confrontar a la bancada: un sector alegó que fueron engañados por los promotores de la carta en la cual se solicitaba al coordinador, Francisco Rojas Gutiérrez, un debate acerca de por qué debía presentarse otra iniciativa.

Legisladores revelaron que durante la reunión del Consejo Consultivo del PRI, celebrada el miércoles anterior, la diputada Marcela Guerra incluso exclamó frente a todos los asistentes: ¡Me engañaron, me engañaron!

Cuando sus compañeros le preguntaron por qué, respondió que la carta se la había dado a firmar una edecán, cuando en realidad quien le explicó el alcance del escrito y le dio copia para que lo leyera fue su compañera María Esther Sherman.

En el encuentro, la sobrina del ex presidente Carlos Salinas, Claudia Ruiz Massieu también retiró su firma, al igual que Arturo Zamora, quien sostuvo que quienes suscribieron la solicitud al coordinador de los diputados lo hicieron sin saber de qué se trataba.

La pugna, derivada de que el grupo del estado de México elaborará una iniciativa, llegó al grado de que en la plenaria de ayer Roberto Albores Gleason afirmó: El reclamo muy sentido es que se trata de un abuso que el Senado haga planteamientos como partido sin siquiera preguntarnos.

Más tarde, en entrevista, Albores Gleason –hijo del ex gobernador de Chiapas Roberto Albores Guillén, represor del movimiento zapatista– insistió en que persiste la inconformidad de diputados con los senadores priístas, porque al presentar su iniciativa lo hicieron como una supuesta reforma política del PRI.

“Si somos pares, requerimos de un debate en el que participemos todos. No se valen los albazos de ese tipo, de que se trata de ‘la propuesta’ del PRI. Se requiere tolerancia a que se presenten otras propuestas”, señaló.

También en entrevista, Rodrigo Reyna afirmó que más de 30 diputados retiraron su firma del documento dirigido a Rojas Gutiérrez. Hay legisladores que no sostenemos lo que se dice en ese documento, del que se pidió respaldo con un sentido y se difundió con otro, indicó.

Sami David David, quien junto con Sherman recabó las firmas de sus compañeros, afirmó que todos los diputados que respaldaron la carta que se envió a Rojas la leyeron antes de dar su aval.

Yo mismo la pasé a muchos, y la leyeron; así que nadie se puede llamar a engaño. A mí nadie me ha pedido retirar su firma y tampoco se han acercado a Canek Vázquez, señaló.

–¿Hay presiones para que los diputados retiren su firma?

–¡Claro! Pero nosotros estamos en lo mismo: que la propuesta se discuta, pero sin que nos veamos con sospecha. Entre los bomberos no se pisan las mangueras.

Todos estamos en la construcción de acuerdos, sabiendo que las propuestas que debemos cuestionar son las del Ejecutivo, no las que se presenten al interior del PRI.