Andrés Manuel López Obrador aseguró en Tampico, Tamaulipas, que es “un grave error del gobierno usurpador de Felipe Calderón la estrategia de enfrentar los problemas de violencia e inseguridad sólo con medidas coercitivas, amenazas de mano dura, cárceles, policías, soldados y leyes más severas.

Ni con un policía en cada esquina podrá atacarse esos flagelos si no hay trabajo, bienestar, educación y oportunidades de desarrollo para los jóvenes. La paz social, la tranquilidad y la seguridad pública son fruto de la justicia, aseveró.

Durante una gira que comenzó en Tampico, continuó por Ciudad Valles, San Luis Potosí, y terminó en Jalpan de Serra, Querétaro, afirmó que el plan de Calderón para combatir la inseguridad y la violencia ha fallado.

¡Claro que es un fracaso absoluto, total! Como prueba, citó los más de 18 mil asesinatos del crimen organizado en tres años del gobierno espurio.

Entrevistado antes de una reunión de evaluación con integrantes de los comités municipales del gobierno legítimo en el sur de Tamaulipas, López Obrador deploró la falta de crecimiento y de oportunidades de estudio y de trabajo para los jóvenes.

En lugar de modificar la política económica neoliberal para garantizar oportunidades de empleo, de bienestar y de estudio, ¿cómo responde (Felipe) Calderón ante la inseguridad? Con soldados, con amenazas de mano dura, puntualizó.

Los únicos jóvenes que tienen posibilidad de empleo son los que aceptan trabajar de policías y soldados, porque todo el presupuesto público se ha destinado al rubro de la seguridad, mientras ha decrecido la inversión destinada a educación y desarrollo social, comentó.

En 27 años de régimen neoliberal no hay políticas para generar empleos, y la manera más humana, eficaz y barata para enfrentar el flagelo de la delincuencia pasa por combatir la pobreza y garantizar condiciones de bienestar y oportunidades de trabajo, añadió.

En Ciudad Valles, donde se reunió con los 21 comités municipales del gobierno legítimo, López Obrador reconoció que Marcelo Ebrad, jefe de Gobierno del Distrito Federal, tiene todas las posibilidades de ser un buen candidato y presidente de la República.

Aseguró que no lo ve como rival, sino como amigo, compañero y buen gobernante. Pero no se descartó como candidato del PRD, pese a las alianzas con el PAN para las elecciones del 4 de julio en algunos estados.

Consideró que esas coaliciones son un error político que no se justifica por los resultados que puedan obtenerse.

Con información de la corresponsal Edith Argüelles