Tulum, 22 de marzo. El presidente Felipe Calderón dio luz verde al plan para construir el nuevo aeropuerto en la Riviera Maya, primero que el gobierno federal concesionará completamente a la iniciativa privada.

La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) publicará las bases de la licitación el 15 de abril y dará el fallo el 5 de diciembre para iniciar la obra, que requerirá una inversión de 3 mil 200 millones de pesos.

Pospuesta por años, la edificación de la nueva terminal aérea fue presentada por Calderón como parte de su estrategia para la reactivación turística del país y como muestra de que el suyo es el sexenio de la infraestructura.

A tono con ese discurso, Juan Molinar Horcasitas, secretario de Comunicaciones y Transportes, presumió que en el actual gobierno se han invertido 1.2 veces más en infraestructura que en el sexenio de Vicente Fox y más del doble que en el de Ernesto Zedillo. Luego exclamó: vamos por más, por mucho más, con inversión pública y privada.

En la zona arqueológica de Tulum, que fue cerrada por elementos del Estado Mayor durante la visita presidencial, destacó que el aeropuerto se construirá en un área de más de mil 500 hectáreas, donde habrá una vía de acceso de seis kilómetros al ramal de la carretera Tulum-Cobá.

En su afán por convencer a los inversionistas de que participen en la licitación, aseguró que en las primeras etapas la terminal atenderá hasta 3 millones de pasajeros al año, más que otras ya consolidadas, como las de Puerto Vallarta, Toluca y San José del Cabo.

Los empresarios del sector han mostrado poco interés por participar, debido a que ya opera el aeropuerto de Cancún, ubicado a 120 kilómetros del sitio donde se edificará el nuevo.

Calderón defendió el proyecto diciendo que actualmente hay una ocupación hotelera de 85 por ciento en la Riviera Maya, y dijo tener enorme cercanía con esa zona, porque hace 17 años viajó a Tulum y Cobá con su esposa, Margarita Zavala, en su luna de miel.

Mientras tanto, la SCT aseguró en una carpeta informativa que los turistas requieren un aeropuerto cercano a su destino final de vacaciones (Playa del Carmen, Akumal y Tulum), y que éste generará 7 mil empleos directos para 2015.

La dependencia indicó que los estudios preparatorios del terreno indican que el impacto ambiental por dicha obra es 100 por ciento mitigable, y que se encontraron vestigios arqueológicos menores que pueden ser trasladados a otro lugar.

Además, la zona de la pista presenta la resistencia necesaria para la operación aeroportuaria y no se encontraron obstáculos hidráulicos, pero se recomienda otro análisis a futuro.

La promesa del jefe del Ejecutivo consiste en minimizar cualquier afectación ambiental y poner especial cuidado en la preservación de los ecosistemas de la región, para que el desarrollo sea armónico, planeado y sustentable.