La Paz, BCS, 23 de marzo. El consulado de Estados Unidos en Cabo San Lucas cerró las puertas a los deudos de Jonathan Hernández Ascencio –asesinado el 4 de marzo en un bar del malecón de La Paz–, quienes pretendían entregar una carta con 5 mil firmas para pedir al presidente Barack Obama la extradición del presunto homicida, Gary Gaines Hidalgo. Daniel Hernández, padre de Jonathan, asegura que el supuesto asesino está oculto en el país vecino.

Alrededor de 100 personas viajaron en dos autobuses de La Paz a Cabo San Lucas para manifestarse frente a la representación diplomática y entregar el documento, pero antes de que llegaran los encargados de la oficina consular cerraron las puertas y se retiraron.

Los inconformes exigieron con pancartas justicia luego de la balacera ocurrida en el bar Las Micheladas, donde una persona murió y tres resultaron heridas.

Marcharon del consulado estadunidense a las oficinas del Instituto Nacional de Migración, pero los encargados tampoco quisieron recibir la carta, con el argumento de que ese asunto no era de su competencia.

El gobernador niega que sus hijos estén implicados

En La Paz, el gobernador Narciso Agúndez desmintió las versiones periodísticas que involucran a sus hijos en el homicidio.

El vocero del mandatario, Antonio Alcántar López, recordó que el hermano de la víctima, Héctor Hernández Ascencio, quien resultó herido en el tiroteo, negó que algún hijo de Narciso Agúndez haya estado en el lugar del tiroteo.

Según el boletín, el gobernador reiteró su compromiso de resolver este caso, por el cual el procurador Fernando González Rubio Cerecer fue destituido, se creó una fiscalía especial y se mantiene comunicación con los padres de Jonathan Hernández.

Destacó que el personal de la Procuraduría General de Justicia de Baja California Sur que atendió inicialmente el caso fue suspendido y se investigará si incurrió en omisiones, lo que habría propiciado la fuga de Gary Gaines, quien, según el hermano del Jonathan Hernández, fue quien disparó a la víctima, acusación que obra en la averiguación previa y fue ratificada por testigos.

Narciso Agúndez tiene cuatro hijos: Christian, arquitecto que reside en el municipio de Los Cabos; Argelia, contadora pública y madre de familia; Narciso, estudiante del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, quien vive en Nuevo León, y Fernando, de 10 años, quien reside con sus padres en La Paz.

Agúndez Montaño lamentó que se pretenda involucrar a su familia en los hechos. Varios medios de comunicación reprodujeron declaraciones ministeriales incluidas en la causa penal 069/2010, que se instruye en el juzgado segundo de primera instancia del ramo penal con sede en La Paz.

En el documento se asienta que Jesús Enrique Duarte y Hugo Espinoza, quienes llevaron en un automóvil a Héctor Hernández Ascencio (herido de dos balas en la cabeza) al hospital general Juan María de Salvatierra, aseguraron que éste dijo: Me disparó el hijo del gobernador, pero no mencionaron su nombre.

Daniel Hernández, padre de la víctima, señaló que las afirmaciones de ambos testigos fueron precisadas por su hijo Héctor, quien señaló en declaración ministerial que Gary Gaines fue el único responsable de los disparos.