México y Estados Unidos firmaron ayer dos acuerdos en materia de seguridad, uno para que Wa-shington facilite información sobre presos –condenados por delitos graves– que serán repatriados a México. El otro es de seguridad aérea para detectar viajeros con documentos falsos o alterados.

Lo anterior, durante los trabajos de la segunda Reunión de Alto Nivel entre ambas naciones en donde, además, los funcionarios se comprometieron a impulsar un programa de trabajo para la modernización de la frontera, entendida como flujo eficiente de mercancías y de personas.

El reto central en el manejo de flujos de personas y bienes es el de separar a los viajeros y carga de alto riesgo de los de bajo, herramientas que ayudan a prevenir el comercio y viajes ilegítimos, señala la declaración binacional denominada Una nueva visión para la frontera.

El nuevo marco que buscan construir funcionarios de ambas naciones es avanzar en la seguridad pública y salvaguardar a los ciudadanos –en la franja fronteriza común– de organizaciones criminales dedicadas a la trata de personas, drogas, armas y dinero.

Al respecto, en conferencia conjunta con la canciller Patricia Espinosa Cantellano, la secretaria de Estado, Hillary Clinton, dijo que el objetivo es contar con una frontera del siglo XXI para la seguridad y para el comercio, “creando comunidades más fuertes que puedan resistir la influencia de los cárteles”. Todos estos esfuerzos, agregó, se construyen sobre la base de nuestra asistencia mutua y para la cual se están aportando cientos de millones de dólares para capacitar a las fuerzas del orden público y fortalecer las instituciones democráticas en México.

Como parte de la Iniciativa Mérida, este plan propone brindar facilidades para el comercio y viajes legales. México es el destino número uno o dos de las exportaciones de 22 entidades de Estados Unidos.

Las secretarías de Gobernación y de Seguridad Pública federal y su contraparte estadunidense, representada por la titular del Departamento de Seguridad Interna, Janet Napolitano, afirmaron en la cancillería que en el caso de los repatriados se intercambiará información de manera continua y por medios electrónicos de registros de delincuentes que han sido condenados por delitos graves en Estados Unidos y que serán devueltos a México.

De esta manera se fortalece la coordinación entre autoridades para garantizar un proceso de repatriación seguro y ordenado, señaló el titular de Gobernación, Fernando Gómez Mont, durante la firma de los documentos.

Los acuerdos tienen como objetivo aumentar la coordinación en materia de seguridad y gestión migratoria, con absoluto respeto a la soberanía y las legislaciones de ambos países.

Problema compartido

El memorando de cooperación sobre el procesamiento e intercambio de información sobre mexicanos a ser repatriados permitirá impedir la reintegración de cadenas criminales en ambos países. El reconocimiento de un problema compartido contribuye a atajarlo en su multiplicidad y generar espacios más seguros y más prósperos a ambos  lados de la frontera. Desde la corresponsabilidad apostamos, pues, por una cooperación más eficiente y más eficaz, agregó Gobernación.

En tanto, el acuerdo para la seguridad de viajeros permitirá compartir mejores prácticas institucionales para identificar a los pasajeros que intenten viajar vía aérea a Estados Unidos, o desde y hacia México, usando documentación falsa, fraudulenta o alterada, así como a posibles criminales y viajeros de alto riesgo que pudieran comprometer la seguridad de las personas.

Este programa se inserta en el contexto de diversos mecanismos de colaboración interinstitucional recíproca, orientados a capacitar y asesorar a agentes federales.