En la Cámara de Diputados se anunció ayer, al mismo tiempo en que se efectuaba en la Secretaría de Relaciones Exteriores la reunión de alto nivel sobre seguridad pública entre autoridades de Estados Unidos y México, que será citado a comparecer el gabinete de seguridad del presidente Felipe Calderón para que sus integrantes expliquen a los legisladores el contenido de la nueva estrategia de combate al crimen organizado entre los gobiernos de ambos países.

En tanto, el pleno del Senado pidió ayer al gobierno federal –varios minutos después de concluida la reunión entre funcionarios de ambos países– que en ese encuentro se exigiera a la administración de Barack Obama mayor participación para detener el consumo de drogas en su territorio, actuar decididamente contra el lavado de dinero y frenar el tráfico de armas a territorio nacional.

El pleno del Senado aprobó esa propuesta de la Junta de Coordinación Política en la que se demanda también a la delegación mexicana hacer públicos los acuerdos a que se llegó con la representación estadunidense.

Sobre el anuncio de que será citado a comparecer en la Cámara de Diputados el gabinete de seguridad del gobierno, el diputado Jorge Carlos Ramírez Marín, vicecoordinador de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) expuso que los funcionarios, entre ellos el secretario de la Defensa Nacional, el titular de Marina, el secretario de Gobernación y el de Seguridad Pública, tendrán que asistir a San Lázaro en la semana de Pascua para dar cuenta de los acuerdos pactados con la administración estadunidense.

Por su parte, Josefina Vázquez Mota, coordinadora del grupo parlamentario de Acción Nacional en San Lázaro, refirió que los gobiernos de Estados Unidos y México están obligados a resolver temas comunes, como el tráfico de armas, el consumo de drogas, el combate al crimen organizado y la elaboración de una agenda permanente de diálogo y comunicación que permita acuerdos binacionales.

El vicepresidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva, coincidió con el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en torno a convocar a comparecer a los funcionarios que integran el gabinete de seguridad nacional para que den cuenta de los acuerdos con sus contrapartes estadunidenses.

En el Senado también hubo reacciones a la reunión entre funcionarios estadunidenses y mexicanos. El coordinador de los senadores del Partido Acción Nacional (PAN), Gustavo Madero, consideró que esa reunión de alto nivel envíe una señal de corresponsabilidad, ya que el problema compete a ambas naciones en lo que se refiere al origen de la cuestión como a su solución. Asimismo, agregó, significa que hay un nivel de confianza y de colaboración como nunca se había dado entre ambos gobiernos en el más alto nivel.

Interrogado sobre el mismo tema, el coordinador de los senadores del PRI, Manlio Fabio Beltrones, sostuvo que México debe ampliar los alcances de los acuerdos de cooperación con Estados Unidos, en particular sobre temas relacionados con los servicios de inteligencia e intercambio de información.

Una vez que la iniciativa Mérida nos hizo perder el miedo, las resistencias y dejar atrás los viejos tabúes de decir no a la colaboración, creo que hoy resulta abiertamente insuficiente y que deberíamos ir todavía más adelante con ese tipo de acuerdos, dijo el priísta en la sede nacional del tricolor, al término de la primera guardia de honor con motivo del 16 aniversario del asesinato de Luis Donaldo Colosio.