Viernes 9 de abril de 2010, p. 29
Zacatecas, Zac., 8 de abril. Resguardados por más de 500 policías federales, estatales y elementos del Ejército, 168 reos de alta peligrosidad del penal de Cieneguillas, quienes –según fuentes policiacas– planeaban otra fuga masiva, fueron trasladados a prisiones de Nayarit y Veracruz.
Los internos del fuero federal, presuntamente vinculados a los cárteles del Golfo y a Los Zetas, enfrentan procesos por delincuencia organizada, narcotráfico y secuestro.
Los 168 reclusos fueron transportados en siete autobuses del penal de Cieneguillas al aeropuerto internacional de Zacatecas Leobardo C. Ruiz, donde abordaron dos aviones Boeing 727 de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).
Ochenta y cinco fueron trasladados al penal federal de Nayarit y los 83 restantes a una penitenciaría de Veracruz.
La operación se inició alrededor de las 8:30 horas, cuando militares ingresaron al penal de Cieneguillas para apoyar a personal de la SIEDO en la identificación y clasificación de los internos, lo que, según trascendió, causó conatos de pelea.
En tanto, unos 350 agentes ministeriales, estatales y de seguridad pública y vialidad, además de un centenar de policías federales, instalaron cercos a uno, tres y cinco kilómetros del reclusorio.
Una avioneta monomotor amarilla de la Fuerza Aérea Mexicana sobrevolaba la zona y minutos antes del mediodía los 168 convictos subieron a los autobuses y el convoy partió custodiado por policías y soldados.
Esposas y madres de los internos llegaron a la carretera Zacatecas-Jerez, que conecta con el penal de Cieneguillas, para tratar de evitar el traslado. Policías ministeriales las rodearon. Algunos de los presos asomaban por las ventanillas.
El 16 de mayo de 2009 un comando de Los Zetas sacó del penal de Cieneguillas a 53 presos por narcotráfico, homicidio, secuestro, extorsión, posesión de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército y asociación delictuosa.