La presidenta del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Beatriz Paredes Rangel, sufre Alzheimer y está más preocupada por el avance de la coalición Unidos por la Paz y el Progreso, formada por los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y Convergencia que por levantar el ánimo de su candidato a la gubernatura de Oaxaca, Eviel Pérez Magaña, consideraron dirigentes estatales del blanquiazul y Convergencia.

En la toma de protesta de Pérez Magaña, efectuada el domingo, se presentó “una Beatriz Paredes con amnesia, que olvidó que en 2002, cuando compitió por la presidencia nacional priísta, declaró que el ahora gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, había pasado de una banda de mapaches a una de delincuentes electorales”, afirmó Mario Mendoza Flores, líder de Convergencia.

En Los Mochis y Culiacán, Sinaloa, se colocaron entre domingo y lunes mantas en las que se acusa de traición a Mario López Valdez, Malova, ex priísta y hoy precandidato del PAN a gobernador. Traición no es transición. Yo tampoco te creo, Malova, dicen los mensajes, que tenían el logotipo y colores de Acción Nacional.

Por su parte, Dante Delgado Rannauro, precandidato a la gubernatura de Veracruz por Convergencia y PT, solicitó ayer a la Universidad Veracruzana que organice tres debates entre él y Miguel Ángel Yunes Linares, de la alianza PAN-Nueva Alianza, y Javier Duarte de Ochoa, de la coalición PRI-Verde Ecologista.

Acusan a la cúpula panista de NL de reventar asamblea

En Monterrey, Nuevo León, Fernando Canales Seltzer, secretario del ayuntamiento de San Pedro Garza García, acusó a la cúpula estatal del PAN de convertir a este partido en un nuevo PRI al usar compra de voluntades y amenazas para mantener el control.

Tras cancelarse el domingo en Apodaca –por falta de quórum– la asamblea en que se postularía para integrar el Consejo Estatal panista, el también hijo del ex gobernador Fernando Canales Clariond afirmó que Aristeo Ríos y Ricardo Contreras, líder municipal y regidor del PAN, respectivamente, se llevaron a los participantes a un desayuno para reventar el acto.

Los responsables de que sólo acudieran 70 de 231 delegados fueron Fernando Larrazábal Bretón, alcalde de Monterrey; Zeferino Salgado Almaguer, delegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), y Raúl Gracia Guzmán, consejero de la Judicatura estatal, acusó Canales Seltzer.

Larrazábal respondió que las declaraciones de Canales Seltzer, a quien calificó de “junior berrinchudo”, no tienen fundamento. A su vez, el coordinador panista en el Congreso local, Hernán Salinas Wolberg, exigió pruebas de las acusaciones.

Agustín Galo, Javier Valdez, Luz María Rivera / especial para La Jornada, y david Carrizales