En el país, 50 asesinatos, 16 de ellos en Durango; más ejecuciones en iglesias de Juárez
Martes 11 de mayo de 2010, p. 11
Perseguidos por sicarios que les disparaban, cuatro hombres a bordo de una camioneta cruzaron a Estados Unidos en precipitada fuga por el río Bravo, a la altura del poblado La Esperanza, del valle de Ciudad Juárez, Chihuahua.
El cuerpo de un hombre alcanzado por los disparos quedó tirado del lado mexicano, pero los otros cuatro alcanzaron el lado estadunidense y fueron auxiliados por personal de la Patrulla Fronteriza, que los trasladó en helicóptero a un hospital de Forth Hancock.
La Patrulla Fronteriza dio a conocer en El Paso, Texas, que su personal solicitó apoyo a las autoridades mexicanas al percatarse de la situación, pues los tripulantes de varios vehículos dispararon más de 100 veces y debió darse auxilio rápido
para salvar a los fugitivos heridos.
Personal del Ejército Mexicano halló en la orilla del río Bravo una camioneta relacionada con el incidente, que presentaba múltiples orificios de bala.
Otras 10 personas también fueron asesinadas en Chihuahua, entre ellas un policía del municipio de Madera, quien fue abatido y uno de sus compañeros levantado por 25 pistoleros. A Ciudad Juárez correspondieron cinco de las víctimas, que incluyen un hombre a quien sus ejecutores ultimaron la noche del domingo frente a la iglesia de San Judas Tadeo.
En la misma localidad, la Policía Federal informó de la detención de dos presuntos sicarios que irrumpieron el sábado pasado en la iglesia del Señor de la Misericordia durante una ceremonia nupcial, y levantaron al novio y dos de sus acompañantes, luego de matar a una persona en el estacionamiento.
En Cancún, Quintana Roo, los cadáveres de dos hombres decapitados aparecieron en zonas diferentes. Los acompañaban mensajes de Los Zetas con advertencias dirigidas a otras personas y una alusión al diario Por Esto.
Aparte de los 13 anteriores hubo al menos 36 asesinatos más en diversas entidades, 16 de los cuales ocurrieron en Durango. De estos últimos, 10 tuvieron lugar en el municipio de Pueblo Nuevo: cuatro de las personas aparecieron semidesnudas a un costado de la autopista a Mazatlán, Sinaloa, y seis fueron privadas de la vida en El Salto, por atacantes que en la mayoría de los casos robaron sus vehículos.
En la capital duranguense hubo cuatro más de las ejecuciones, entre ellas las de Francisco Ramos Salas y su hijo Javier, a cuyos cuerpos acompañaba un mensaje no revelado. En la penitenciaría local un reo condenado en 2007 por el asesinato de un jefe policial apareció con marcas de estrangulamiento, pero las autoridades dijeron que se suicidó. Con ésa ascendió a 50 el número de muertes reportadas.
Del total, ocho ejecuciones fueron perpetradas en Tamaulipas entre domingo y lunes. Tres más ocurrieron en La Paz, Baja California Sur, durante un solo ataque. Entre los ahora occisos figuran Enrique Atondo Gastélum, su hijo Miguel Enrique, de 13 años, además de un desconocido que los acompañaba cuando llegaban a su domicilio y varios hombres los acribillaron.
En la misma localidad sudbajacaliforniana, militares decomisaron 650 kilos de mariguana. Unas dos toneladas más fueron descubiertas Coahuila, dentro de un camión volcado el domingo en Saltillo; mientras, en Torreón cuatro sujetos que se desplazaban en dos motocicletas dispararon indiscriminadamente y privaron de la vida a dos personas que caminaban por calles del centro.
De los demás asesinatos, uno se cometió en Baja California, otro en Guerrero, uno más en Michoacán y en el poblado de Pótam, municipio sonorense de Vícam, el policía Leonel Castro Molina mató a un hombre identificado como José Mario Amarillas Valencia. Los restantes tres ocurrieron en Sinaloa, y entre las víctimas estuvo Isaías Araiza Rodríguez, policía municipal de Culiacán.
Rubén Villalpando, Hugo Martoccia, Saúl Maldonado, Raymundo León, Antonio Heras, Sergio Ocampo, Ernesto Martínez, Javier Valdez y Ulises Gutiérrez