La desaparición de Diego Fernández de Cevallos provocó ayer sorpresa y consternación entre dirigentes y legisladores de PAN y PRD, quienes lamentaron los hechos y expresaron su deseo de que el ex candidato presidencial se encuentre bien y el acontecimiento tenga el mejor desenlace.

El dirigente nacional del blanquiazul, César Nava, manifestó que por el momento lo único claro es que no hay ningún dato que pueda hacer pensar que su correligionario perdió la vida. Por ello, abundó, esperamos tenerlo con nosotros sano y salvo.

Sin embargo, el ex dirigente nacional panista Manuel Espino escribió en la mañana, en su espacio de Twitter, que el cadáver de Fernández de Cevallos había sido encontrado en un campo militar de Querétaro, según datos que le habían compartido amigos que han hablado con algún familiar de Diego. Minutos más tarde el duranguense aclaró que esa era información no confirmada y que toca al Ministerio Público hacer dicha labor.

Por su lado, César Nava expresó que el PAN está en espera de que las autoridades correspondientes informen sobre los acontecimientos. Calificó al ex legislador de compañero entrañable, que ha dado lo mejor de su vida al servicio de México y a la causa de Acción Nacional.

Consideró que el panista, en 1994, marcó un parteaguas en la democracia mexicana, al ganar el primer debate televisado de candidatos presidenciales. Fernández de Cevallos es un hombre sin el cual no se podría explicar la transición a la democracia, pues su visión jurídica y su genio sin duda son claves para reformas constitucionales y legales que permiten competencias más equitativas y participativas.

Cuauhtémoc Cárdenas, ex candidato presidencial del PRD, expresó que más allá de las diferencias políticas, lo importante es que aparezca bien. En tono similar, el ex mandatario Vicente Fox confió en que nada haya pasado a su correligionario y que se encuentre bien.

De gira por Durango, Marcelo Ebrard, jefe de gobierno de la ciudad de México, hizo un llamado a cerrar filas y actuar de manera inmediata para que se pueda ubicar lo más pronto posible al panista. En ese contexto ofreció a la PGR la colaboración de su gobierno, por si en algo puede coadyuvar en la pesquisa.

Mientras, el presidente del PRD, Jesús Ortega, calificó la situación de compleja, delicada y altamente preocupante, tras manifestar su solidaridad a la familia y amigos del ex senador.

Carlos Navarrete, presidente del Senado, confió en que las instrucciones dadas por el jefe del Ejecutivo a las secretarías de Gobernación y de Seguridad Pública, así como a la Procuraduría General de la República, tengan éxito en la localización del político mexicano.

El senador panista Guillermo Tamborrel expuso su preocupación porque el excandidato presidencial se encuentre mal herido, e hizo votos porque regrese sano y salvo.

Enrique Peña Nieto, gobernador del estado de México, lamentó la desaparición del panista y condenó enérgicamente el hecho. Además, confió en que pronto aparecerá.

Por último, Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis de México, censuró el hecho. Apuntó que el cardenal Norberto Rivera Carrera ha manifestado su preocupación y espera que se respete la vida del político. Valdemar precisó que más allá de las críticas por algunas actuaciones personales, ha sido una persona que ha contribuido mucho con el país.