Lunes 24 de mayo de 2010, p. 29
Nueva York, 23 de mayo. La reforma de regulación financiera adoptada en el Senado estadunidense, que debe todavía ser sometida a revisión antes de promulgarse, puede costarle cara a los bancos de Wall Street, dado que limita algunas de sus actividades más lucrativas. No es bueno para nosotros
, dijo escuetamente un directivo de un importante banco de Wall Street que pidió el anonimato.
Según los analistas de Bank of America-Merrill Lynch, la reforma podría costarle al sector bancario entre 30 y 50 por ciento de sus ganancias de corretajes, lo que se traduciría en una caída de 20 por ciento en el beneficio por acción.
Las posibles restricciones sobre el corretaje a título propio y los productos derivados deberían afectar sobre todo a los banco de inversiones
, explicó la agencia Standard and Poor’s (S&P). Estas medidas podrían ocasionar una baja significativa de los ingresos y de los beneficios en los próximos años
, continúa. Los bancos podrían incluso verse impedidos de comercializar swaps, productos financieros similares a los seguros.