Tucson, Arizona, 23 de mayo. Un grupo plural de senadores, encabezados por el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores para América del Norte, Luis Alberto Villarreal, se reunirá aquí con autoridades y organizaciones civiles que tienen personalidad jurídica, a fin de convencerlos para que impugnen ante la Corte de Estados Unidos la Ley SB 1070, legislación que criminaliza y pone en riesgo a más de 400 mil mexicanos que laboran sin permiso legal en esta entidad.

Queremos hacer una evaluación clara de las repercusiones que tendrá esa ley. Tenemos que estar preparados para lo peor y para actuar en caso de que a finales de junio entre en vigor, a fin de que personalidades amigas acepten promover que se declare inconstitucional, comentó Villarreal.

Para ese objetivo, explicó, en la visita de dos días a esta entidad sostendrán encuentros con el procurador de justicia del estado de Arizona, Terry Goddard –quien se perfila como el candidato demócrata que hará frente a la gobernadora Jan Brewer en las próximas elecciones–, con el alcalde de Phoenix, Phil Gordon, además de entrevistarse con dirigentes de las cámaras de comercio e industria, que se han visto afectadas también, así como con empresarios que tienen intereses a ambos lados de la frontera, y con organizaciones latinas defensoras de los migrantes.

Se reunirán también con el procurador del condado de Maricopa, que es el distrito más racista y xenófobo de Arizona, dominado por el terrible sherif Joe Arpaio, quien desde antes de que se aprobara la Ley SB 1070 ha sido nefasto y con las nuevas facultades que tendría actuará de forma criminal contra nuestros migrantes, agregó.

En la agenda figura también una reunión con congresistas de Arizona y un encuentro con los cinco cónsules generales de México en el estado, precisamente para hacer un análisis de las repercusiones de la ley y tomar todas las providencias que el caso amerita.

Es importante el cabildeo para que se presente el recurso ante la Corte, “porque si bien México no tiene personalidad jurídica para impugnar, eso no significa que no podamos promover esa acción ante nuestros aliados que sí tienen esa personalidad allá en Arizona, a fin de que se desafíe esta ley, ya que en realidad sería la única solución verdadera.

Aclaró que luego de la molestia que generó entre los legisladores republicanos el discurso del presidente Felipe Calderón ante el Congreso, donde criticó la llamada ley Arizona, en el grupo plural de senadores será muy cuidadosos de no generar un clima de animadversión, que pudiera lesionar aún más a los indocumentados mexicanos.

Somos muy respetuosos de la soberanía de otros países y desde luego que no pretendemos que se piense que se trata de un acto de intromisión, por el contrario, es un acto respetuoso, en respaldo y acompañamiento de nuestros migrantes, comentó.

Otros senadores que asisten a la gira de trabajo son el vicecoordinador del PRD, Silvano Aureoles la priísta Rosario Green, la senadora del PAN Adriana González, y la perredista Claudia Corichi.