Jueves 27 de mayo de 2010, p. 28
Shenzhen, China, 26 de mayo. Foxconn Technology, proveedor taiwanés de componentes para Apple, que se enfrenta a una oleada de suicidios en su fábrica del sur de China, tomó este miércoles varias medidas radicales, como pedir a sus empleados que se comprometan por escrito a no quitarse la vida.
Ello luego que otro empleado del grupo, que trabaja con grandes trasnacionales, se mató el martes tirándose por la ventana del edificio de Foxconn en Shenzhen, el décimo suicidio en China desde enero, en el seno del primer fabricante de componentes electrónico del mundo y noveno en Shenzhen, ciudad ubicada a las puertas de Hong Kong.
En total, 12 empleados chinos de Hon Hai Precision Industry, conocida por su nombre comercial como Foxconn, se han tirado por la ventana desde el principio del año; dos de ellos han resultado gravemente heridos.
Ofrece salvar vidas
Este miércoles el presidente y fundador del grupo, Terry Gou, acudió a la ciudad china en avión privado desde Taiwán y se disculpó por los suicidios. Presento mis disculpas por el impacto que ha tenido en la empresa
, declaró y se comprometió a hacer lo posible por salvar vidas
. Sin embargo, defendió las prácticas de gestión del grupo e insinuó que algunos suicidios se debían a problemas personales.
Según el canal televisivo taiwanés CTI y el diario cantonés Southern Metropolis Daily, la dirección del grupo pidió a los empleados comprometerse por escrito a no atentar contra su vida y a aceptar un tratamiento siquiátrico si su estado físico o mental es anormal
.
Por otra parte, la compañía habría desplegado redes alrededor de los edificios para impedir que los empleados se tiren por la ventana.
Apple, que prepara el lanzamiento mundial de su iPad, indicó que evaluaba los esfuerzos iniciados por Foxconn para evitar todo nuevo suicidio.
Apple se compromete a asegurar que las condiciones en las cadenas de producción sean seguras y que los empleados sean tratados con respeto y dignidad
, indicó.
Apple se ha negado a indicar si el iPad es ensamblado en la fábrica china que arma ya el iPhone.
Según Luis Woo, responsable del grupo, el problema viene en parte porque gran número
de empleados tienen entre 18 y 24 años, la edad más común para los suicidios, y viven lejos de sus familias.
Para los grupos de defensa de los trabajadores, la dramática serie de suicidios en las fábricas chinas del grupo taiwanés refleja las difíciles condiciones de vida de millones de obreros en China.