Al no lograr avances para establecer una mesa nacional de negociación y a casi un mes de la entrega de su pliego general de demandas, poco más de 8 mil profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) marcharon en la capital del país para exigir mejores condiciones salariales y de trabajo, pero también para demandar la cancelación de la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE).

Luego de cuatro horas de negociación con autoridades federales, una comisión de ocho dirigentes seccionales disidentes fue recibida por el subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación (SG), Roberto Gil Zuarth, quien sólo nos prometió una nuevo encuentro para este 3 de junio. Planteó que existe la posibilidad de convocar encuentros con funcionarios de la Secretaria de Educación Pública (SEP) y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), pero nada en concreto.

Jorge Cázares, secretario general de la sección 18 de Michoacán, señaló que el funcionario federal fue muy reacio a establecer una mesa nacional de negociación, pues insistió en que deberíamos regresar a nuestros estados y ahí plantear nuestras demandas. La respuesta fue contundente. No vamos a ir a donde no existen posibilidades presupuestales para dar una respuesta, por lo que se mantendrá el plantón permanente y las movilizaciones masivas.

En tanto, Azael Santiago Chepi, líder de la sección 22, de Oaxaca, reiteró su llamado a las autoridades federales para generar un espacio de diálogo y atender las demandas legítimas de los trabajadores de la educación. Nosotros vamos mantener una posición muy clara en favor de una educación pública, laica, gratuita y de calidad, pero también la advertencia clara de que no vamos a permitir que continúe la ACE ni el deterioro de las condiciones de trabajo de los docentes.

Desde las primeras horas de este viernes, miles de maestros de Oaxaca, Michoacán, Guerrero, Zacatecas, Tlaxcala, Distrito Federal, estado de México, Puebla, San Luis Potosí y Morelos, entre otros, se concentraron en el Zócalo capitalino, de donde partieron, poco después de las 10 horas, en dos contingentes.

El primero, encabezado por la sección 18 de Michoacán, marchó por la calle 5 de Mayo, hasta avenida Hidalgo, Paseo de la Reforma y Bucareli. Un segundo bloque, integrado por profesores de la sección 22 de Oaxaca, se movilizó por las calles de Pino Suárez e Izazaga, hasta llegar a avenida Chapultepec.

Poco después de las 12 horas, los maestros oaxaqueños realizaron un mitin frente a Televisa Chapultepec, en donde demandaron un espacio en cadena nacional para difundir sus demandas. Al no encontrar respuesta, los manifestantes se enfrentaron a elementos de la policía capitalina que resguardaban el inmueble.

Los profesores inconformes derribaron una de las puertas de acceso a la televisora para exigir que no sólo se escuche a la corrupta de Elba Esther Gordillo, si no al verdadero magisterio de base. Después, cientos de maestros permanecieron frente a las instalaciones esperando a su dirigente, Azael Santiago Chepi, quien fue recibido junto con una comisión de maestros disidentes. Al salir, la marcha continúo hasta las instalaciones de la SG.

Horas de espera

Tras su arribo a la dependencia federal, miles de maestros esperaron por más de seis horas, incluso bajo una intensa lluvia, a que la comisión nacional negociadora fuera recibida por el subsecretario Roberto Gil.

Cientos de granaderos y policías federales resguardaron las instalaciones de la SG, donde se colocaron vallas en sus principales accesos, lo que ocasionó un severo caos vial. En alrededor de cinco calles y avenidas aledañas a la secretaría se impidió el tránsito vehicular.

Ante la demora para recibir a la representación del magisterio disidente, que en un primer momento sólo fue escuchada por funcionarios de la unidad de atención ciudadana, profesores de Michoacán derribaron las vallas metálicas instaladas en Bucareli. No se generó un enfrentamiento con la policía.

El contingente magisterial rodeó las instalaciones de Gobernación con el apoyo de cientos de integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas, quienes marcharon con el magisterio en demanda de un alto a la represión.

Poco después de las 18 horas, y luego de que una comisión de docentes informó sobre los resultados del encuentro, miles de profesores se reagruparon para regresar al Zócalo.