Washington, 14 de junio. Las personas que buscan tratamiento para desórdenes del sueño reportaron tener sexo mientras se duermen, llamado sexsomnia, con mayor frecuencia de lo esperado, reveló un estudio publicado hoy por el diario USA Today.

Casi 8 por ciento de los pacientes referidos a clínicas para el tratamiento de desórdenes del sueño reportaron que habían iniciado o tomado parte en conductas sexuales mientras dormían, en tanto tres cuartas partes de quienes dijeron padecer sexsomnia son hombres.

Pensamos que sólo identificaríamos a unas cuantas personas, pero fueron casi una de cada 12, afirmó Sharon Chung, del Laboratorio de Investigación para el Sueño de la Red Universitaria de Salud, en Toronto.

Investigadores estudiaron la conducta sexual durante el sueño en una gama entre la masturbación y el intercurso (estimulación) en 832 pacientes.

Alrededor de 11 por ciento de los hombres y 4 por ciento de las mujeres señalaron haber realizado alguna de esas actividades sexuales.

Los investigadores indicaron que la prevalencia es probablemente menor en la población que no tiene problemas para conciliar el sueño.

Según Chung, la sexsomnia es una forma de desorden del sueño llamado parasomnia, es decir, conductas no deseadas que ocurren durante el sueño.

Un acto de parasomnia puede ser tan pequeño como abrir los ojos o rechinar los dientes hasta levantarse y aspirar la alfombra, hablar, comer o tener sexo, añadió Chang.

Mientras 15.9 por ciento de los pacientes que reportaron sexsomnia usaron drogas, 7.7 por ciento dijeron no utilizarlas.

Las personas que experimentaron sexsomnia reportaron problemas de insomnio (dificultad para conciliar el sueño o mantenerlo), fatiga y depresión y los índices de fumadores o de consumo de cafeína fueron similares, según el estudio.

La sexsomnia ya fue utilizada como defensa en un caso de asalto sexual en Toronto, ya que –según Chung– generalmente las personas no están conscientes de lo que hacen y no se acuerdan.

La sexsomnia se trata con medicamentos en la actualidad, aunque en opinión de la especialista no es un problema mayor, mientras no cause problemas legales o a la pareja no le importe, pero puede dejarla cansada a la persona al día siguiente.