Durban/Johannesburgo, 16 de junio. Unos mil sudafricanos se manifestaron este miércoles en Durban antes del partido España-Suiza para pedir al gobierno que destine a los pobres la misma suma que gastó en el Mundial 2010 de futbol.

Entre los manifestantes figuraban centenas de agentes de seguridad de la empresa privada Stallion, en huelga en el estadio de Durban, que se opusieron violentamente a la policía tras el partido Alemania-Australia el domingo, cuando reclamaban mejoras salariales.

Con 24 horas de retraso, se informó que la policía sudafricana asumió la responsabilidad de la seguridad en el certamen mundial, luego de las huelgas estalladas por guardias de empresas privadas, aunque ni los organizadores locales del certamen ni gente de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) quisieron declarar al respecto.

A las afueras del inmueble de Durban, pescadores, que no tienen derecho a instalarse en los alrededores, participaron también en la manifestación, así como los vendedores de un mercado de la ciudad.

La FIFA no tiene derecho a llevarse nuestro sustento. El gobierno tomó todo el dinero de los contribuyentes para (dárselo a) la FIFA, aseguró uno de los organizadores de la manifestación, Desmond D’sa.

Si hay dinero para los estadios, no debería haber gente sin techo, añadió otro de los líderes, Allan Murphy.

El gobierno destinó 4 mil 300 millones de dólares para esta primera del Mundial.

El silencio de los organizadores no permitió aclarar cómo se manejará la situación en otros estadios. En Durban, donde comenzó la protesta, la situación vivió hoy una escalada de tensión cuando los huelguistas intentaron incendiar la sede de su empresa. Dos guardias se acercaron con antorchas encendidas al lugar, pero fueron controlados por sus compañeros. Los trabajadores siguen acampando ahí en reclamo de un aumento salarial.