Ficción, que planes se usen de modo proselitista
Miércoles 23 de junio de 2010, p. 3
El uso electoral del programa Oportunidades es más ficción que realidad
. En Oaxaca, Guerrero y Chiapas es donde se entregan los mayores apoyos de los planes sociales, y ninguno es gobernado por el PAN. No existe correlación entre el mapa electoral y el social
, señaló Ignacio Muñoz Orozco, jefe de la oficina del secretario de Desarrollo Social.
En entrevista, explicó que México es el único país donde se realiza un blindaje electoral de los programas sociales. Somos exagerados en la cuestión de la regulación
, pero ello se debe a experiencias, abundó.
El blindaje considera, entre otras medidas, cambiar fechas de entrega de los apoyos, para que no coincidan con las elecciones; 40 días antes de los comicios se suspende la publicidad; existe un código de ética interno para los funcionarios públicos; este año se imprimieron mil 400 ejemplares del Manual Ciudadano, que se distribuye en las delegaciones, y 48 horas antes del proceso comicial se guardan los vehículos oficiales, porque anteriormente se utilizaban durante la jornada para transportar votantes.
Consideró que ese tema está de moda entre los partidos políticos, pero a estas alturas los programas están tan automatizados que es difícil utilizarlos (electoralmente)
. Expresó que muchas veces los políticos denuncian en los medios de información la utilización comicial de éstos, pero formalmente nunca presentan inconformidades. En caso de hacerlo, apuntó, no les dan seguimiento.
“Si analiza los programas sociales de los estados contra los de la Federación, ahí va a encontrar un problema. Me llama la atención escuchar a gobernadores decir que la Federación manipula dichos planes, cuando ellos tienen carteles públicos diciendo ‘Oportunidades es un programa aprobado por el PRI’. Lo entendemos por los tiempos electorales, pues los actores políticos hacen política.”
En relación con la filiación política de los delegados de la Sedeso, la mayoría de los cuales son panistas, manifestó: antes eran priístas y nadie se asustaba. El que pertenezcan a un partido es cuestión personal. El Estado tiene sus mecanismos de transparencia y hay reglas de inclusión a los programas
.