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El jefe de Gobierno del DF inauguró la cátedra que lleva el nombre del diplomático

La xenofobia y el racismo vividos por Gilberto Bosques siguen vigentes: Ebrard

Se rinde homenaje a quien desde su misión consular en Francia salvó la vida de miles de personas

 
Periódico La Jornada
Viernes 25 de junio de 2010, p. a12

Don Gilberto Bosques dejó toda una historia, una tradición, una huella imborrable porque salvó a miles de personas corriendo todos los riesgos que uno puede imaginar. Es un hombre excepcional y es un acto de justicia que esta cátedra lleve su nombre, expresó el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, durante la inauguración de la Cátedra del Exilio Gilberto Bosques, en la Casa Refugio Citlaltépetl.

Ebrard –acompañado de Cuauhtémoc Cárdenas y de Laura Bosques, hija del diplomático–, explicó que la cátedra será permanente y se llevarán a cabo foros de discusión histórica, así como de perspectivas sobre el siglo XXI.

“Mucho de lo que él vivió sigue presente en el mundo que estamos viviendo. La xenofobia, el racismo, ahí tenemos la ley Arizona sin quererla comparar con el nazismo, pero su origen ideológico es el mismo: la raza determina todo.”

El jefe de Gobierno capitalino recordó que Gilberto Bosques (1892-1995) y Lázaro Cárdenas (1895-1970) promovieron la defensa de la dignidad humana, de la vida y de la libertad, una de las tradiciones más profundas y mejores de México.

Durante la ceremonia el coordinador de la Comisión del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución desde la ciudad de México, Enrique Márquez, explicó que junto con la Casa Refugio Citlaltépetl organizaron la Cátedra del Exilio Gilberto Bosques, para rendir un justo homenaje a este gran mexicano quien, desde su misión consular en Francia durante la segunda Guerra Mundial, permitió que miles de hombres, mujeres y niños se salvaran de la barbarie del franquismo y del nazismo.

Márquez adelantó que pronto habrán de develarse la escultura de Don Benjamín Carreón, en la Alameda Central, y un busto de Gilberto Bosques, en la ciudad de Madrid.

Para difundir la solidaridad que la sociedad mexicana ha mostrado hacia los exiliados que llegaron a la ciudad de México durante el siglo XX, de muchas partes del mundo, la Casa Refugio Citlaltépetl y la Comisión Bicentenario realizaron una colección de 25 carteles en español, inglés y francés, así como su catálogo.

La colección Ciudad de México, ciudad solidaria, capital de asilos, se ha expuesto en diversos lugares del país y está disponible para enviarse a las instituciones y organizaciones civiles defensoras de los derechos humanos.

Seminario y presentación de libros

La cátedra Gilberto Bosques comprende también la impartición de un seminario en la Casa Refugio Citlaltépetl del 31 de agosto al 2 de septiembre, a las 19:30 horas, en el que se reflexionará sobre temas como identidad y diversidad; las sensaciones y ficciones de los escritores, así como la escritura y creación literaria, que ofrece la posibilidad de imaginar nuevos valores.

En el seminario participarán Eduardo Milán, Geney Beltrán, Ximena Escalante, Xavier Velasco, Mario Bellatin, Nicolás Cabral, Luis Felipe Fabre, Neige Sinno y Mauricio Montiel.

Como parte del reconocimiento a Gilberto Bosques, mexicano ilustre, se desarrollará un foro del 26 al 28 de octubre, a las 19:30 horas, también en la Casa Refugio Citláltepetl, sobre los temas La revolución del saber, El arte y El mundo que nos rodea.

Dentro del proyecto editorial y de divulgación de la Cátedra del Exilio Gilberto Bosques se presentaron dos libros. El primero, Entre desterrados, es una recopilación de textos originales de Fabrizio Mejía Madrid, Héctor Manjarrez, Rafael Vargas, Eduardo Milán y Alberto Ruy-Sanchez, entre otros.

Tras desterrados, el segundo, reúne textos de Fabienne Bradú, Sandra Lorenzano, José Manuel Prieto, Eduardo Vázquez Martín y Margo Glantz, entre otros.

Los libros fueron coordinados por Phillipe Ollé Laprune, director de la Casa Refugio Citlaltépetl y coeditados con el Fondo de Cultura Económica.