Viernes 23 de julio de 2010, p. 17
Para la Secretaría de Gobernación (SG), el recrudecimiento de hechos violentos en los días recientes –que incluye el asesinato de casi una veintena de personas reunidas en un salón de fiestas en Torreón y la detonación de un coche bomba en Juárez– significan un paso atrás
de los delincuentes.
¿Qué observamos de esos acontecimientos? Que es tal el acoso que están sufriendo los delincuentes por parte de las fuerzas federales, que han dado un paso atrás y de forma cobarde ya no están enfrentando a esa fuerza. Que su forma de reaccionar a ese acoso es mediante de métodos violentos de larga distancia
, aseveró el subsecretario Roberto Gil.
El funcionario evadió responder a la pregunta de si los hechos en referencia, particularmente el del coche bomba, pueden ser considerados como narcoterrorismo.
Argumentó que más allá de la discusión de los adjetivos, es necesario preocuparnos por encontrarle solución a esa realidad. Esa expresión de violencia, agregó, es resultado del acoso que están sufriendo (el crimen organizado) por parte de las fuerzas federales.
El subsecretario Gil dijo que se requiere proteger a las fuerzas federales por medio de mayor capacidad operativa y de inteligencia, a fin de que no sean vulnerables ante aquellos delincuentes que, insistió, han dado un paso atrás. No obstante, el funcionario dijo que esos adjetivos
(narcoterrorismo) han sido utilizados para explicar hechos sistemáticos en donde se utilizan determinados métodos con el fin de provocar terror.