Domingo 1º de agosto de 2010, p. a24
Dos son las afirmaciones que se hacen en torno al extenso poema que da vida a este libro, integrado por 30 cantos.
La primera, que su autor, el venezolano Vicente Gerbasi (1913-1992), estaba destinado a escribirlo, lo cual hizo entre 1943 y 1945, año este último en que fue publicado por primera vez. La segunda, que sus versos asumen la deuda de la poesía del continente americano con los exilios, el paisaje y la universalidad de la literatura.
Hilvanada con una musicalidad sinfónica, mediante esta obra el poeta conjura la figura de su padre, un inmigrante italiano que muere cuando aquél contaba con 15 años de edad, y a partir de ella da cauce a una amplia gama de sentimientos e imágenes que transitan de la melancolía a lo onírico, de la sensualidad a la idea de la muerte, de la metafísica a la contemplación del trópico.
Según describe la especialista Jacqueline Goldberg, en el prólogo de esta obra, Gerbasi evoca la naturaleza desde una interioridad inédita hasta mediados del siglo XX en Venezuela, sumando memoria, plenitud y cierto desasosiego cosmopolita a los telúricos vocablos de su conmoción
.
De manera inexplicable, este emblemático y conmovedor poema había permanecido varios años en el olvido y ausente de ediciones incluso en el país natal del autor.
De allí la importancia que hoy un sello mexicano lo recupere y lo ponga a disposición de los lectores nacionales y del resto del continente.
Acaso sirva para confirmar porqué la de este escritor es considerada una de las obras poéticas más consolidadas del siglo XX en el mundo de lengua hispana.
Título: Mi padre, el inmigrante
Autor: Vicente Gerbasi
Editorial: Laberinto
Número de páginas: 78
Precio de lista: 100 pesos