El costo de la nueva sede del Senado se disparó en casi 478 millones de pesos, además de que la obra tiene un retraso de más de dos meses, por lo que no estará lista en los próximos días, como originalmente se planeó, con miras a que los legisladores pudieran celebrar ahí el bicentenario de la Independencia nacional.

Los senadores no podrán sesionar en sus modernas instalaciones de Paseo de la Reforma e Insurgentes, pero confían en que inaugurarán esa sede el próximo 20 de noviembre, aniversario de la Revolución Mexicana, según detalló el presidente de la Junta de Coordinación de esa cámara, el panista Gustavo Madero.

Ayer, los coordinadores de todas las fuerzas políticas recibieron el informe sobre los trabajos de la nueva sede, en el que se especifica que el contrato original con el Grupo Indi, signado a fines de 2007, fue por un monto de mil 699 millones 648 mil pesos, pero a la fecha asciende a 2 mil 177 millones 128 mil pesos, debido a la inflación y a modificaciones en la obra. Es decir, casi 478 millones de pesos más.

La constructora se había comprometido a terminar los trabajos a mediados de este mes, a fin de que el Senado pudiera sesionar en ese inmueble a partir del primero de septiembre y llevar a cabo ahí los festejos y ceremonias con motivo del bicentenario de la Independencia, programados para ese mes.

No fue posible y, según comentó el coordinador de los senadores del Partido del Trabajo, Ricardo Monreal, el Senado analiza aplicar una penalización económica al Grupo Indi por el retraso en más de 30 por ciento del proyecto, según se especifica en el contrato firmado con esa constructora.

Penas convencionales

En el informe se precisa que, de ser procedente, se aplicarán penas convencionales en aquellos trabajos que no se concluyeron a tiempo, como son los sistemas eléctricos y en general los acabados.

Por su parte, el senador Gustavo Madero dijo que confían en que podrán estrenar el edificio de Reforma e Insurgentes el próximo 20 de noviembre, una fecha muy simbólica. Detalló que hace cien años, en lo que ahora es el Monumento a la Revolución, se había planeado construir el Palacio Legislativo, pero el movimiento armado lo impidió.

Hoy estaremos precisamente inaugurando la sede del Senado, cien años después. Creemos que es muy emblemático y con una visión moderna de lo que será una institución democrática, en el marco también de la discusión de la reforma política.

Los meses que faltan para ello, el Senado trabajará en su viejo edificio de Xicoténcatl, en el Centro Histórico, mismo que mantendrán como museo legislativo y que podrá utilizarse para sesiones solemnes o reuniones con jefes de Estado e invitados extranjeros.

Posible sesión en Comitán, en homenaje a Belisario Domínguez

Por otra parte, en la Junta de Coordinación Política se discutió también la propuesta de que el Senado lleve a cabo una sesión solemne en Comitán, Chiapas, con motivo del aniversario luctuoso de Belisario Domínguez, en octubre.

El problema es que el traslado y estancia en Comitán de 170 legisladores, personal de apoyo e invitados, por dos días, tiene un costo de un millón y medio de pesos.