Martes 24 de agosto de 2010, p. 20
Bogotá, 23 de agosto. El gobierno del presidente Juan Manuel Santos rechazó hoy la propuesta de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de acudir a una asamblea de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) para exponer su visión sobre el conflicto interno que vive el país desde hace más de cuatro décadas, e indicó que no necesita intermediarios
ni es partidario de que el grupo guerrillero exponga sus opiniones en un escenario internacional.
De su lado, alrededor de mil asistentes al Encuentro Internacional de Mujeres y Pueblos de las Américas marcharon de Barrancabermeja a la base de Palanquero para protestar por el uso por Estados Unidos de bases militares en el país.
Al reincorporarse a sus actividades tras una cirugía cardiaca, el vicepresidente del país, Angelino Garzón, señaló que las FARC tienen que dar manifestaciones muy claras para poder creerles. No solamente al Estado colombiano, sino a la sociedad
.
Santos ha afirmado que sólo dialogará con las FARC cuando el grupo dé muestras de buena voluntad, como la liberación de rehenes y la ruptura de su vínculo con narcotraficantes.
Las FARC, la organización guerrillera más antigua de Colombia, cuenta en la actualidad con 8 mil combatientes, y el Ejército de Liberación Nacional con cerca de 2 mil 500, según cálculos de las fuerzas de seguridad.
Protestan contra bases
Más de mil mujeres de 12 países partieron a las 14 horas de Barrancabermeja a la población de Puerto Salgar, en un recorrido de 100 kilómetros que culminó con una vigilia con actos culturales y artísticos en la base de Palanquero, de la fuerza aérea Colombiana.
Luz Mery Vanegas, promotora de la jornada, comentó a la emisora local Caracol que exigen que los gobiernos dejen de lado la inversión militar para privilegiar la social.
El acuerdo firmado entre Bogotá y Washington fue declarado inconstitucional por la Corte de Colombia el pasado 17 de agosto, pero el gobierno colombiano aún tiene la posibilidad de presentar el convenio al Congreso para que lo apruebe.
En tanto, el sargento del ejército colombiano Pablo Emilio Moncayo, quien por más de 12 años fue rehén de las FARC, salió del país por amenazas de muerte que ha recibido en las últimas semanas, informó su familia.
El padre del militar, Gustavo Moncayo, confirmó la salida.