Lunes 30 de agosto de 2010, p. 37
Con un retraso de seis meses, la Secretaría de Obras y Servicios labora a marchas forzadas para abrir esta semana a la circulación la vialidad de Gran Canal, con una longitud de 35 kilómetros, de Río de los Remedios a Circuito Interior, y una capacidad de flujo de 10 mil vehículos diarios, a fin de convertirse en una alternativa a la circulación de las avenidas Eduardo Molina y Oceanía.
La maquinaria pesada que tiene un año en el tramo de Talismán a Circuito Interior, ha dado paso a cuadrillas de trabajadores encargados de colocar los señalamientos viales y barreras de contención, pintar las líneas de los carriles, podar las áreas verdes y retirar la basura que arrojan los vecinos.
La consistencia del subsuelo, las lluvias y la falta de liquidez financiera provocaron el retraso de la obra –con una inversión de 67 millones de pesos–, pero estamos a punto de entregarla y resolver el problema de tránsito que aquí se presenta, pues a diferencia del poniente no hay segundos pisos, túneles o puentes vehiculares. Por ejemplo, el que iba a conectar las delegaciones Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza por el Gran Canal no se hará, porque no hay dinero
, comentaron trabajadores, quienes pidieron omitir sus nombres para evitar represalias.
Por otra parte, una cuadrilla de trabajadores se encarga de reparar nuevamente la lateral de esta última vialidad a la altura de la colonia Malinche, donde hace menos de seis meses se abrió un socavón que implicó el cierre de la calle por cinco semanas. Casi estamos por cumplir ese mismo tiempo de labores, pues se levantó el concreto y provocó un pequeño hundimiento, que ya se reparó
, señalaron.