Urge el pastor Terry Jones al imán Feisal Abdul Rauf dar respuesta a reubicación de mezquita
El mandatario defiende la construcción de templo islámico cerca de la Zona Cero de Nueva York
Sábado 11 de septiembre de 2010, p. 23
Washington, 10 de septiembre. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reiteró su rechazo a la quema del Corán y aseguró que el noveno aniversario del 11 de septiembre de 2001 es una buena ocasión para recordar que Estados Unidos es una nación bajo un Dios
que puede ser llamado con diferentes nombres, en tanto que el pastor Terry Jones, quien convocó a quemar el libro sagrado musulmán, viajó a Nueva York para exigir al imán que promueve la construcción de una mezquita cerca de la Zona Cero que responda si está de acuerdo en reubicarla.
Mientras tanto, los medios de comunicación estadunidenses que dieron a conocer el proyecto de Jones ahora mantienen una postura crítica con respecto a la cobertura que debe dedicarse a este acto deliberadamente provocador.
La idea de quemar un libro sagrado de otra religión es contrario a lo que defiende este país y a sus valores fundacionales
, reiteró Obama, quién aseguró que ese tipo de acciones ponen en riesgo
a las tropas y alienta a grupos radicales como Al Qaeda.
El mandatario defendió la construcción de una mezquita en un centro cultural musulmán cerca de la Zona Cero de Nueva York, pese a las sensibilidades
que ha despertado el proyecto.
Si se puede construir una iglesia en un lugar, se puede construir una sinagoga en ese lugar, se puede construir un templo hindú y se debería poder construir una mezquita
, sostuvo en rueda de prensa en la Casa Blanca, y subrayó que a pesar de la extraordinaria sensibilidad
que rodea todo los relativo con los atentados del 11 de septiembre de 2001, Estados Unidos no está en guerra con el Islam, sino contra los grupos terroristas que han distorsionado el Islam o que utilizan falsamente su bandera para sus actos destructivos”.
Jones canceló su plan de quemar el Corán en el aniversario de los atentados, pero intentó condicionar su decisión a que el imán Feisal Abdul Rauf, que promueve la construcción de una mezquita en la Zona Cero, la reubique.
Hasta el momento el imán, quien se desconoce si aceptó recibir a Jones hoy, dijo a CNN: No vamos a jugar con nuestra religión, ni con cualquier otra. Tampoco vamos a hacer un trueque
.
La iniciativa incendiaria del líder de la pequeña iglesia de Gainsville ha logrado mantener en vilo a los estadunidenses, a Obama, a la Unión Europea, a Naciones Unidas, a dirigentes internacionales, a personajes religiosos, a la secretaria de Estado Hillary Clinton –quien esta semana hizo un llamado, en un acto de patriotismo
, a que los medios ignoren la quema del Corán– y a medios de comunicación estadunidenses como Fox News, el periódico The Washington Post, la revista The Washingtonian y la agencia de noticias Associated Press.
Éstos respondieron al llamado de Clinton pero que no dejan de ser parte de los medios responsables de haber convertido en figura internacional a un predicador fracasado que tiene la suerte de haber arrastrado a 50 personas a su iglesia
, como definió Mike Thomas, columnista del periódico Orlando Sentinel, de Florida.
Medios que ahora se gastan en un debate introspectivo respecto de la cobertura brindada al reverendo Jones y a la quema del Corán, uno de los casos lamentables en los que por haberse convertido en noticia, la historia genera ahora historias legítimas
, según afirmó el crítico televisivo de la revista Time James Poniewozik.