Washington, 11 de septiembre. El periodista estadunidense Jeffrey Goldberg rechazó haber malinterpretado a Fidel Castro y reiteró que el líder revolucionario dijo durante la entrevista que el modelo cubano no funciona. Francia calificó de inaceptable la acusación del ex mandatario de estar cometiendo una especie de holocausto racial al expulsar del país a miles de gitanos, y cuestionó su interés por los derechos humanos.

Pese a la aclaración de Castro en un discurso en la Universidad de La Habana, donde manifestó que lo real es que mi respuesta significaba lo contrario de lo que los dos periodistas estadunidenses interpretaron, el comunicador de la revista The Atlantic insistió en su blog que no entiende cómo la declaración del líder en torno al modelo cubano podría significar algo distinto a lo que significa.

Por otra parte, en Francia levantó ámpula la opinión de Castro sobre la política de repatriación de gitanos a Rumania y Bulgaria dictada por el presidente francés Nicolas Sarkozy.

Lo último que podía esperarse eran noticias de la expulsión de los gitanos franceses, víctimas de la crueldad de la extrema derecha, que eleva ya a 7 mil las víctimas en otra especie de holocausto racial, comentó el líder cubano en un mensaje leído durante la presentación de la segunda parte de su libro autobiográfico.

Que Fidel Castro se interese por los derechos humanos sí que es verdaderamente revolucionario, expresó el ministro de Relaciones Exteriores, Bernard Valero, al margen de una reunión de jefes de la diplomacia de la Unión Europea en Bruselas.

Sin embargo, la percepción de Castro se acerca a la del Parlamento Europeo, que esta semana exigió al gobierno francés suspender su política y recalcó que las expulsiones masivas están prohibidas por la ley europea, al suponer una discriminación basada en raza o etnia, y a la del comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa.