Oxfam, Barzón, Red de Promotoras y Asesoras Rurales y productores de café orgánico de Chiapas demandaron al gobierno invertir en una agricultura sustentable para garantizar la producción de alimentos ante el cambio climático.

Al concluir el foro Diálogo de frente al cambio climático, sostuvieron que los campesinos requieren mecanismos y estrategias que minimicen la vulnerabilidad; las emergencias por el cambio climático se están atendiendo con un fondo nacional para desastres naturales quebrado.

Alfonso Ramírez Cuéllar, presidente del Barzón, expresó que ya es tiempo de dejar de buscar privilegios para un sector – en alusión al rural– y de revisar todos los subsidios para hacer más eficiente el uso de los recursos públicos; nosotros tenemos que poner más de nuestra parte.

Se pronunció en favor de establecer el cobro de un peso por cada mil litros de agua que se consuma en las zonas urbanas y con esos recursos crear un fondo para la conservación y mantenimiento de los mantos acuíferos; también consideró indispensable que la CFE revise los subsidios que entrega para la extracción de agua en pozos y se sustituya dicha energía por una solar.

El cambio climático ya nos alcanzó y la única manera de enfrentarlo es haciendo cambios profundos, resaltó.

Dolores Rojas, coordinadora de campañas de Oxfam, habló de la urgencia de retornar a la producción de alimentos con métodos tradicionales, impulsar un comercio justo para los campesinos, ya que eso no está alejado de la búsqueda de productividad y mayor rentabilidad en el agro.

Consideró que en la conferencia de Naciones Unidas sobre cambio climático, a realizarse a finales de año en Cancún, es una oportunidad para que el gobierno de México establezca un mecanismo financiero mediante el cual se puedan emprender acciones de mitigación y adaptación, necesarias para participar en la arquitectura financiera internacional con el fin de atender el cambio climático.

México debe poner el ejemplo en casa y reflejar la preocupación en torno al cambio en los fenómenos naturales, que también alteran los ciclos de siembras y producción de alimentos.

Gloria Carmona, de la Red Nacional de Promotoras y Asesoras Rurales demandó que las mujeres rurales sean reconocidas como sujetos de crédito y se les otorguen los apoyos necesarios para que puedan producir con mayor desahogo. No se trata de poner en sus espaldas todo el peso de la oferta de los alimentos, sino reconocer que ellas han sustituido en el campo a los hombres que han migrado.