Pablo Sánchez Servitje, Pablo Adame y Jonathan García se disputan hoy el cargo
Sábado 25 de septiembre de 2010, p. 9
En Asamblea Nacional, los jóvenes panistas elegirán este sábado en Querétaro a su dirigente para el periodo 2010-2013, luego de una campaña en la que no faltaron las descalificaciones y los visos de guerra sucia.
El proceso reviste importancia porque se trata de elegir al titular de la Secretaría de Acción Juvenil, espacio que se ha convertido en semillero de altos dirigentes del panismo, como es el caso de César Nava, presidente nacional del blanquiazul, y el propio Felipe Calderón.
Pero no sólo por ello llaman la atención los comicios de este día, sino también porque detrás de los candidatos se encuentran personajes de peso en el partido, como el gobernador de Morelos, Marco Antonio Adame, y el propietario de Bimbo, Lorenzo Servitje.
Los aspirantes a ocupar la instancia citada son: Pablo Sánchez Servitje, nieto del empresario mencionado; Juan Pablo Adame, hijo del mandatario morelense, y Jonathan García, joven regiomontano que cuenta con el apoyo del alcalde de Monterrey.
En entrevista, los tres coincidieron en que es necesario mejorar el quehacer de la Secretaría de Acción Juvenil, con miras a los comicios de 2012. Juan Pablo Adame criticó que dicho organismo se haya dedicado más al trabajo interno con los panistas, lo cual no es malo, pero no es suficiente
, destacó.
Unos 100, en padrón de Zacatecas
Por ejemplo, señaló que en Zacatecas el padrón juvenil del PAN es de poco más de 100 personas, por lo que propuso hacer más proyección hacia el exterior, conquistar la calle y trabajar con todos los jóvenes, no solamente con los militantes.
Es muy cómodo hablar sólo a los panistas, a los que piensan y se expresan igual que tú, pero eso limita mucho al partido
, subrayó el aspirante, a quien se identifica con el ala más conservadora del blanquiazul y se afirma que cuenta con el apoyo del ex dirigente nacional Manuel Espino.
Consideró que desde Acción Nacional se puede influir en las políticas públicas dedicadas a dicho sector, donde se requiere fortalecer al Instituto Mexicano de la Juventud.
Sánchez Servitje coincidió con su contendiente en que desde la secretaría en disputa se puede incidir en el quehacer gubernamental dirigido a los jóvenes, pues sus propuestas forman parte de la plataforma electoral que ofrece el instituto político.
Ex secretario juvenil en la delegación Miguel Hidalgo y ex coordinador de la misma área en el comité directivo del PAN en el Distrito Federal, mencionó que el blanquiazul pasa por un mal momento en cuanto a las simpatías de la juventud, ya que en los comicios de 2009 bajó su votación entre los integrantes de dicho sector, del cual, es este momento sólo cuenta con 10 mil militantes activos en toda la República.
Para ampliar la afiliación, resaltó que se requiere una reforma que facilite la inscripción y que los muchachos tengan más derechos. También planteó que debe realizarse mayor trabajo en las calles y no únicamente estén en temas de formación.
Sin ser parte del equipo de trabajo de la actual secretaría juvenil o de la anterior –como afirma que son sus contendientes–, expuso que dicha instancia requiere un cambio, para lo que, en principio, destacó que impulsará una estrategia más abierta para llegar a 2012.
Miembro del PAN desde los 16 años y ex integrantes de la dirigencia juvenil que está por concluir su gestión, Jonathan García evitó cualquier crítica a quienes ocupan actualmente la secretaría en disputa. Hicieron su chamba
, dijo, aunque aceptó que se pueden hacer cosas para mejorar el quehacer de la instancia.
Sin pertenecer a una familia influyente dentro del panismo, situación que dijo no lo pone en desventaja respecto a sus adversarios, mencionó que su programa de trabajo incluye la formación de estrategas, asesores y coordinadores de campaña, lo que implica dar a los jóvenes herramientas para que salgan a ganar elecciones.
Dado lo competido de la contienda, los candidatos prevén que habrá segunda vuelta electoral, es decir, que los delegados tendrán que sufragar dos veces, a fin de que alguno de los aspirantes alcance la mayoría simple más uno.
Hasta el pasado fin de semana se habían registrado 4 mil 700 delegados, pero se estima que no todos asistirán a la novena Asamblea Nacional.