Madeleine Albright, ex canciller de Estados Unidos, se reunió ayer con el presidente del Senado, Manlio Fabio Beltrones. Sostuvo que es necesario buscar nuevos espacios para el diálogo entre su país y México, con el propósito de combatir al enemigo común: la delincuencia organizada y sus secuelas de violencia. Además, se pronunció por resolver el problema migratorio entre ambas naciones, con pleno respeto a los derechos humanos.

En el encuentro a puerta cerrada que tuvo lugar en el Xicoténcatl, Albright –quien fuera secretaria de Estado en la administración de Bill Clinton– estuvo acompañada por Carlos Pascual, embajador de Estados Unidos en México. Aclaró que ya no tiene ningún encargo gubernamental y su presencia en el país es exclusivamente como ciudadana estadunidense.

Al final de la reunión de aproximadamente 30 minutos, Beltrones detalló que Albright, quien además de talento tiene una enorme experiencia en el ejercicio de gobierno, mostró especial afecto y conocimiento de México. Asimismo, se refirió a la relación bilateral y los derechos de los migrantes, temas en los que es experta.

Ella misma se asume como parte de la migración que enriqueció a Estados Unidos, ya que proviene de la ex Checoeslovaquia, precisó Beltrones.

Dijo que Albright habló sobre la pertinencia de encontrar solución a los problemas de migración en todos los lugares del mundo, en especial los que se viven en la frontera sur de Estados Unidos.

Agregó que la preocupación de la ex funcionaria también es porque no existe comprensión de uno y otro lados a ese fenómeno migratorio, que merece ser atendido. Con firmeza manifestó que siempre debemos estar muy atentos a defender los derechos humanos de unos y otros.

Beltrones informó que también conversaron sobre el combate conjunto al problema del narcotráfico y la delincuencia organizada, que es de orden trasnacional.

Así como Estados Unidos y México compartieron la responsabilidad del intercambio comercial con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte –agregó–, en la actualidad deberán hacerlo en materia de seguridad pública y delincuencia organizada. Nadie debe sentirse ajeno, es el momento de darnos una nueva oportunidad para actuar contra el enemigo común.

Consideró que fue muy instructivo escuchar los planteamientos de Albright acerca de que debemos aplicar nuevas fórmulas para solucionar los graves problemas de inseguridad.