Pese a que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) tuvo una reducción de 11.1 por ciento en la iniciativa del presupuesto, a la Comisión Nacional Forestal se le asignaron 6 mil 547 millones de pesos, 21.6 por ciento más que en 2010. Sin embargo se mantiene la prioridad a los programas de reforestación y restauración, por encima de los destinados a los bosques naturales.

El Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS) explica en un análisis que el incremento en el presupuesto de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) incluye cambios importantes en la distribución de Proárbol, así como un incremento a programas de reforestación y restauración, pese a las críticas que se les han hecho.

El consejo civil mexicano estima que la mayoría de los cambios en el presupuesto para 2011 son positivos y reflejan una mejor distribución de los recursos hacia las distintas áreas del sector forestal, en lo que destacan el incremento a los programas vinculados directamente con el manejo de bosques naturales, Promoción de la Producción y Productividad de los Ecosistemas Forestales de Manera Sustentable y Programa de Desarrollo Forestal.

Menciona que estos programas destinados a mejorar el manejo de los bosques naturales, donde se incluyen el desarrollo de la producción forestal, la certificación, la mejora en la competitividad de los productores y la integración de las cadenas productivas, reciben un incremento de 591 millones de pesos, 97 por ciento más que en 2010. Considera que este aumento para el manejo de los bosques es un cambio muy positivo, ya que la crisis de producción y competitividad que viven las comunidades y ejidos han provocado menores inversiones para el cuidado y buen manejo de los bosques con repercusiones en la calidad y conservación de los mismos, así como una profundización del déficit comercial anual del sector que para 2009 alcanzó los 4 mil 421 millones de dólares”.

Agrega que si bien es de reconocerse que el país requiere enormes esfuerzos para recuperar y restaurar áreas deforestadas y deterioradas, resulta difícil de entender el incremento proyectado para estos programas si se consideran las posiciones de diversos sectores relativos a la escasa contribución que tiene la reforestación para resolver la problemática de las regiones forestales.