Deplora el embajador que la delincuencia llegue a usar coches bomba y granadas
Miércoles 29 de septiembre de 2010, p. 8
Frente al debate en torno a si existe en México una narcoinsurgencia, el embajador de Estados Unidos en nuestro país, Carlos Pascual, dijo ayer que no importa cómo se le llame, lo que sí es crítico es el nivel de violencia que se ha alcanzado.
Agregó que eso preocupa al gobierno de Washington, el cual sigue completamente comprometido en apoyar a las autoridades mexicanas para controlar el problema y dar mayor seguridad a la población.
En conferencia de prensa, luego de participar en la Green Expo, el diplomático señaló que la administración calderonista enfrenta una delincuencia en la que se matan unos a otros, pero que también ha enfocado su atención en las autoridades. Citó el asesinato de alcaldes y el del candidato a gobernador de Tamaulipas, Rodolfo Torre Cantú.
También destacó que la delincuencia ha tomado medidas que revelan su falta de humanidad y conciencia, como el uso de coches bomba y de granadas, al tiempo de informar que no hay números exactos sobre los mexicanos que se han trasladado a ciudades fronterizas de Estados Unidos para huir de la violencia.
Hemos oído y visto muchas historias al respecto, pero no hay cifras exactas
, subrayó. Destacó que existe preocupación por el impacto que puede tener en personas inocentes la utilización de coches bomba y granadas por parte de las bandas criminales, y por eso no sería sorpresa que mucha gente que ha tenido la capacidad de huir a otro lado lo haya hecho. Insistió por ello en que es importante trabajar con el gobierno mexicano y hacer todo lo posible para apoyar el proceso de restablecer el estado de derecho en algunas ciudades.