La Paz, 5 de octubre. Después de una semana de protestas en el país, con paros y marchas de periodistas y propietarios de medios de comunicación, el presidente boliviano, Evo Morales, interpuso hoy sus buenos oficios para que la Comisión de Constitución de la Cámara de Senadores modifique uno de dos artículos del proyecto de Ley contra el Racismo y toda forma de Discriminación, cuestionados por considerar que afectan la libertad de expresión y el derecho al trabajo de los periodistas.

El vocero presidencial, Iván Canelas, informó que Morales se reunió en el palacio de gobierno, por separado, con dirigentes de la Asociación Nacional de la Prensa de Bolivia, de la Federación de Trabajadores de Prensa de La Paz (FTPLP) e integrantes de la Red Contra el Racismo (RCR).

Los comunicadores le plantaron la necesidad de modificar o eliminar los artículos 23 y 16 de la ley antirracista, pero también escuchó objeciones de la RCR a cualquier cambio a los mismos.

Finalmente Morales convocó a los miembros de la comisión parlamentaria, quienes aceptaron modificar el artículo 23, que señalaba que cuando el hecho (la difusión de ideas racistas o discriminatorias) sea cometido por un trabajador de un medio de comunicación social, o propietario del mismo, no podrá alegarse inmunidad ni fuero algunos.

La nueva redacción indica ahora que ningún ciudadano o ciudadana podrá alegar inmunidad ni fuero alguno. No obstante, el artículo 16, que señala que el medio de comunicación que autorice y publique ideas racistas y discriminatorias será pasible de sanciones económicas y de suspensión de licencia de funcionamiento, no sufrió modificaciones.

Canelas mencionó además que el presidente vio con buenos ojos la propuesta de la FTPLP de que si en algún caso extremo se suspende la licencia de algún medio, ésta debe pasar a los trabajadores para salvaguardar su derecho al trabajo, y esto debe verse en la reglamentación.

Antes de estas reuniones, unos 200 periodistas se manifestaron en la plaza Murillo –donde se ubican las sedes del Ejecutivo y Legislativo– con pancartas con leyendas como Contra el racismo sí, contra la prensa no, pero ante un fuerte contingente policial que intentaba expulsarlos del lugar.

Sin embargo, un grupo que logró plantarse frente al palacio de gobierno gritaba No nos calla el presidente, Evo, no le des un rodillazo a la libertad de expresión, esto en referencia al golpe que el mandatario le dio el domingo a un empleado municipal durante un partido amistoso de futbol.