Política
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Lo califican de monumental simulación y piden que se revise el reglamento interno

Critican diputados ausentismo que usa como pretexto trabajo en comisiones
 
Periódico La Jornada
Miércoles 6 de octubre de 2010, p. 6

El abandono de las sesiones ordinarias en que incurren sistemáticamente los diputados federales, que se manifiesta con cientos de curules desocupadas durante los trabajos en el pleno, fue el tema que unificó criterios de los legisladores de PRD, PAN y PRI. Desde el año pasado los representantes populares han sido pillados en ocio, lo que implica no atender su trabajo en las asambleas, hecho que justifican aduciendo su participación en comisiones y grupos de trabajo.

Ayer, al filo de las tres de la tarde, cuando se iniciaba el debate en torno a la urgencia de trasladar recursos económicos a las entidades afectadas por los huracanes, Víctor Manuel Castro Cosío (PRD) subió a tribuna para insistir a la presidencia de la cámara que verificara el quórum de la sesión. “Seguimos simulando, si seguimos por esta vía, yo creo que es parte de la descomposición política que existe en el país. A mí sinceramente me preocupa el que estemos alrededor de 50 diputados, y esto, yo he insistido, no quisiera ir en demérito de esta institución, pero tampoco me gustaría ser cómplice de esta monumental simulación.

Lo que la gente en las calles sabe es que la clase política no está siendo consecuente, una clase política que no le está garantizando a la nación la estabilidad y el bienestar que requiere, una clase política que simula como hoy simulamos, (y así seguirá) por ese tobogán de una nación donde todo es simulado.

Javier Corral Jurado (PAN), presidente de la Comisión de Gobernación, expuso que el análisis de Castro Cosío resultaba incompleto, porque debiéramos tener cuidado en transmitir a la nación mexicana lo que en realidad las reuniones o el pleno de la Cámara de los Diputados representa o es el reflejo de nuestro trabajo. En efecto, hemos perdido el quórum, pero no porque no estén aquí los diputados. Efectivamente muchos compañeros diputados están en comisiones, otros participan en reuniones de sus grupos parlamentarios, otros más atienden comisiones.

El panista coincidió en afirmar que una de las grandes reformas en política atañe al Congreso Federal. Así es, hemos perdido el quórum, pero no nos autoflagelemos. No mandemos un mal mensaje. Alrededor de este recinto trabajan decenas de diputados en reuniones de comisiones, que son citadas a la misma hora que este pleno para desahogar la sobrecarga de trabajo que tenemos. Creo que estamos mandando un mal mensaje, cuando nosotros mismos decimos que estamos en un proceso de simulación, dijo.

Castro replicó al recordar que el Congreso Federal es el poder  peor calificado por la población, aunque paradójicamente terminó ponderándolo. La gente sabe bien que por supuesto una de las actividades más demeritadas es la legislativa, y yo no quisiera abonar a ello. Esta República tiene una vida en la normalidad a pesar de todas las dificultades, gracias también al Congreso. Gracias a las diputadas y a los diputados de este país el país tiene la estabilidad frágil, difícil, con todo lo que podamos criticar, podamos debatir, pero tiene gracias a esta institución una República que ojalá fortalezcamos.

Fue Pablo Escudero Morales  (PVEM) quien no aceptó la idea de que el trabajo en comisiones es el sustantivo y el tema de los plenos vacíos debe ser objeto de otro tratamiento.

Los que ya tuvimos la oportunidad de revisar el reglamento interno, el proyecto de este reglamento que se nos ha dado, pues evidentemente no recoge esta inquietud, no solventa este problema y creo que estamos en un muy buen momento para fijar posición, que nos reunamos dentro de la Junta de Coordinación Política, con el presidente de la Comisión de Reglamentos y tratemos este asunto, porque definitivamente el formato que está teniendo esta asamblea nosotros pensamos que se encuentra agotado y tenemos que encontrarle una salida práctica.

Desde su curul, Pedro Ávila Nevares (PRI) reprochó el inmovilismo y la abulia de la mayoría de los diputados, y recordó al ex presidente de la República, Adolfo López Mateos, el mejor calificado por la población en la época contemporánea.

“Decía el licenciado López Mateos que el diputado federal era el representante mismo de la nación. Creo que aquí sí se ha desvirtuado lo que es un diputado federal, porque no sólo es para estar en comisiones o para andar de gira, sino también para responder a los intereses de la patria aquí en el pleno… hay que estar unidos para enfrentar todas las vicisitudes que el pueblo de México está pasando, como los precios elevados de la energía eléctrica, el diesel, el gas, todo lo que está pasando. Si nosotros no nos unimos, pobre de México.”