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Solicitan al Ejecutivo transparentar el proceso

No politizar sucesión en la SCJN, pide el Senado

Se habla de un centenar de aspirantes al puesto

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Los ministros Sergio Armando Valls y Margarita Beatriz Luna Ramos, durante la sesión de anteayer en la Suprema CorteFoto María Luisa Severiano
 
Periódico La Jornada
Miércoles 6 de octubre de 2010, p. 19

Mientras que el Senado de la República demandó al presidente Felipe Calderón que no prevalezcan los criterios políticos en la designación del ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que ocupará el lugar del recién fallecido José de Jesús Gudiño Pelayo, se inició ya la rebatiña por ocupar esa vacante, una vez pasado el duelo.

Y es que, según varios funcionarios del máximo tribunal del país revelaron a La Jornada, al menos un centenar de jueces de distrito, magistrados de circuito, secretarios de estudio y cuenta de la Corte y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), además de varios abogados postulantes, han enviado su currículo a la Presidencia de la República con la intención de ser considerados candidatos a conformar la terna que en breve se presentará ante el Senado.

Los senadores pidieron al Ejecutivo transparentar todo el proceso de selección, para que participe la comunidad jurídica y la sociedad y se privilegie la trayectoria y no el perfil ideológico de quien se habrá de integrar a la Corte.

El perredista Pablo Gómez advirtió que el PAN va a tratar de imponer a alguien de la derecha doctrinaria, quizás enviando al Senado una fórmula con tres de sus amigos, por lo que es importante este llamado del Senado para que la propuesta no sea de sopetón. La bancada del PAN, agregó el perredista, quiere que en la terna estén reaccionarios de pura cepa.

El punto de acuerdo aprobado fue propuesto por la bancada del del PRI. El senador Ricardo Fidel Pacheco dijo que sería lamentable que el Presidente pretenda que el más alto tribunal del país se decantara hacia el conservadurismo.

Entre los candidatos a suceder a Gudiño que nunca han sido jueces federales de carrera o que son externos al Poder Judicial figuran Jorge Moreno Collado, militante del PRI desde 1959 y consejero de la Judicatura Federal desde 2007; César Jáuregui Robles, ex senador del PAN por Chihuahua y consejero de la Judicatura desde marzo pasado; Daniel Cabeza de Vaca, consejero de la Judicatura desde 2009, y Miguel Alessio Robles, consejero jurídico del presidente Felipe Calderón y ex subsecretario de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación.

También se menciona a Fernando Gómez Mont, ex secretario de Gobernación; a Fabián Aguinaco, ex presidente de la Barra Mexicana Colegio de Abogados e hijo del ex ministro José Vicente Aguinaco, quien fue cabeza de la Corte tras su reforma de 1994; al fiscalista Luis Manuel Pérez de Acha y a los connotados penalistas José Luis Nassar Daw y Alonso Aguilar Zinser.

Entre los que sí son de carrera judicial y pueden ser incluidos en la terna destacan los magistrados Manuel González Oropeza y Alberto Pérez Dayán, uno del TEPJF y el otro de un tribunal colegiado de circuito; también se habla de Jorge Pardo Rebolledo, magistrado del segundo tribunal colegiado en materia civil en Toluca, y del magistrado José Nieves Luna Castro, uno de los tres jueces que en 2005 concedieron a Raúl Salinas de Gortari un amparo que le permitió recobrar su libertad. Otro es Jacinto Figueroa Salmorán, titular del juzgado 11 de distrito en materia de amparo.

Por el lado académico se habla de los investigadores Ana Laura Magaloni, Sergio López Ayllón y José Luis Soberanes, ex presidente de la CNDH.

José de Jesús Gudiño Pelayo falleció el pasado 19 de septiembre en Londres, Inglaterra, donde se encontraba vacacionando.