El titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Raúl Plascencia, se refirió ayer al michoacanazo y dijo que es muy lamentable que personas inocentes hayan tenido que estar meses en prisión sin que hayan existido elementos para considerarlos delincuentes.

Después de que la Procuraduría General de la República presentó una queja administrativa contra el juez que ordenó la liberación de los funcionarios de Michoacán detenidos, el ombudsman señaló que todos debemos comprometernos a respetar las instituciones, aun cuando no compartan nuestra opinión.

Si el Poder Judicial determinó la liberación de los funcionarios de Michoacán, por no haber elementos en su contra, deben sumarse esfuerzos para no repetir un acto de ese tipo y, sobre todo, reconocer que hubo una equivocación y habrá que remediarla.

Entrevistado tras la inauguración de una jornada por el derecho a defender y a comunicar, dijo que en el caso de la propuesta de imponer cadena perpetua a delincuentes –que se debate en Chihuahua–, el problema no es de penas, sino de falta de eficiencia de las instituciones que no detienen a los delincuentes, que por eso matan y abusan de la población.

Cuando ocurren 2 mil 200 homicidios en Ciudad Juárez, lo fundamental es detener a los responsables y procesarlos, agregó.