La Habana, 22 de octubre. El gobierno del presidente Raúl Castro confirmó hoy que está vigente la reforma económica, al anunciar que tiene lista la base legal, en una tácita respuesta al cuestionamiento popular sobre cuándo se abrirá el registro de microempresas y autoempleos que el mandatario anunció en agosto pasado.

Las normas jurídicas están listas, dijo el diario oficial Granma, al explicar cómo se actualizará el régimen fiscal instaurado en 1994. Informó que el impuesto sobre nómina será de 25 por ciento, muy por encima de los rangos que tiene ese tributo en América Latina y el Caribe.

Este impuesto tiene carácter regulador para evitar concentraciones de riqueza o que se utilice indiscriminadamente la fuerza de trabajo, señaló el Granma. Mientras más personal se contrate más gravoso será, apuntó.

El diario reconoció que del plan de extensión del sector privado falta lo más importante: la implementación. Ésta pudiera ser una réplica indirecta a la intensa afluencia de personas a las oficinas de Trabajo y de la Administración Tributaria, que en las últimas semanas han indagado por los trámites para montar su pequeño negocio particular.

Aún se desconocen públicamente los ordenamientos legales de esa parte de la reforma, aunque algunas de sus claves se han difundido en la prensa y en reuniones de niveles directivos en las empresas.

Otra parte de la reforma es el despido masivo de al menos medio millón de trabajadores entre este mes y marzo de 2011.

Los investigadores del Centro de Estudios de la Economía Cubana de la Universidad de La Habana, Pavel Vidal y Omar Everleny Pérez, estimaron que la lista de 178 giros de autoempleo difundida el mes pasado es reducida para asimilar el impacto de los despidos.

Las categorías son demasiado específicas y frenan la iniciativa de los potenciales microempresarios, por lo que deberían ser más generales y flexibles. Las actividades reconocidas son poco intensivas en conocimiento y, en consecuencia, faltarán ubicaciones adecuadas para universitarios que pierdan su empleo, estimaron los académicos.

En un artículo publicado en la revista digital católica Espacio Laical, los autores sugirieron financiar los nuevos negocios con microcréditos externos, ante la crisis de liquidez local, y facilitar por esa vía las importaciones para pequeñas y medianas empresas (Pymes) y cooperativas.

En esa forma podría impulsarse un mercado interno que incentivaría la legalidad, añadieron los especialistas, aludiendo que gran parte de los giros reconocidos ya existen en un mercado sumergido. Falta acompañar estos cambios con leyes que creen confianza para la inversión de esfuerzos y dinero en emprendimientos privados y que garanticen tanto al Estado como a los ciudadanos el cumplimiento de derechos y deberes.

El mayor obstáculo al crecimiento de las Pymes es el estancamiento de la economía, al que se agregará el despido masivo, según los investigadores. Todo indica que la economía deberá convivir en el corto plazo con altas tasas de desempleo, lo cual es un reto desde varios puntos de vista.

El Granma indicó que no habrá nuevos impuestos, sino que se aplicarán los existentes a los privados. Según esas modalidades, el trabajador independiente pagará su seguridad social. La recaudación total de los microempresarios quedará, como hasta ahora, en las tesorerías municipales.

Ese sector también pagará impuestos sobre ingresos personales y ventas. El diario no abordó la fiscalidad del arrendamiento de casas, que según versiones puede llegar hasta 40 por ciento del ingreso.