Atenas, 2 de noviembre. Dos bombas estallaron este martes en las embajadas de Suiza y Rusia en Atenas, sin causar heridos y los daños fueron menores. Además, la policía griega encontró otros paquetes sospechosos dirigidos a las legaciones de Chile y Bulgaria y uno más fue interceptado en las oficinas de una compañía de correos dirigido a la sede de la misión diplomática de Alemania.

Las autoridades dijeron que en total son ocho los paquetes bomba descubiertos desde el pasado lunes, luego de que el martes anterior por la noche la policía griega destruyó dos envoltorios sospechosos de contener explosivos en el aeropuerto de Atenas.

Según informes, estos paquetes tenían como destinatarios la organización policial Europol en Holanda y la Corte Europea de Justicia en Luxemburgo.

Se trata de la más reciente ola de amenazas de este tipo en la capital griega, un día después de que se detectaron cuatro paquetes similares destinados al presidente francés Nicolas Sarkozy y a tres legaciones diplomáticas, de México, Holanda y Bélgica.

Pocas horas antes, otro paquete explosivo, expedido en Grecia hace dos días y cuyo destinatario era la canciller alemana Angela Merkel, fue localizado en la cancillería en Berlín, anunció el ministro alemán de Interior, Thomas de Maiziere. Agregó que no se sabe que tan peligroso era el artefacto ya desactivado, pero se estima que podría haber causado heridos.

Asimismo, se reportó que un paquete sospechoso enviado desde Grecia e interceptado a bordo de un avión en el aeropuerto italiano de Bolonia, la noche del martes al miércoles, al parecer iba dirigido al primer ministro italiano Silvio Berlusconi. El avión volaba de Atenas a Roma, pero fue obligado a aterrizar en Bolonia para su revisión ante una alarma.

Grecia suspendió todo envío de correo hacia destinos europeos durante dos días, se anunció mediante un comunicado policial. El transporte de correo y paquetes al extranjero queda detenido durante 48 horas para permitir continuar con las inspecciones, señaló.

La policía griega detuvo el lunes a dos sospechosos. Uno de ellos, un estudiante de química de 22 años, buscado por extremismo anarquista, y el segundo, de 24 años, también conocido por su activismo, en un país en que el extremismo es recurrente encarnado en diversos grupos de ideología anarquista o ultraizquierdista.

Los sospechosos, que estaban armados, comparecieron hoy ante un fiscal, que los ha inculpado por cuatro cargos, entre ellos pertenencia a una organización terrorista y acciones terroristas.

Se investiga si pertenecen al grupo Células de Conspiración del Fuego, que en mayo de 2009 se adjudicó atentados contra dos estaciones de la policía.

Según Theodoros Papatheodorou, profesor de criminología en la Universidad del Peloponeso, estos actos esencialmente simbólicos buscan llamar la atención de las opiniones públicas en Europa y denunciar la crisis económica que golpea al continente, y en especial a Grecia.

El primer ministro griego, Giorgios Papandreou, condenó estos actos cometidos por aquellos que tratan en vano de perturbar la paz social con actos criminales y los acusó de atentar contra la imagen de Grecia en el extranjero en un momento particularmente difícil.

Los incidentes se producen en un contexto social tenso en Grecia, a pocos días de elecciones locales decisivas para el gobierno socialista, que está aplicando un impopular programa de austeridad para reducir el elevado déficit del país, a cambio de la ayuda financiera de la zona euro y el Fondo Monetario Internacional.