Sábado 6 de noviembre de 2010, p. 6
Matamoros, Tamps., 5 de noviembre. El reportero Carlos Alberto Guajardo Romero, del diario Expreso de Matamoros, murió al ser alcanzado por el fuego cruzado de un enfrentamiento entre elementos de la Armada de México y grupos delictivos.
El periodista, de 37 años, cubría el tiroteo que se produjo en el cruce de las avenidas Pedro Cárdenas y Longoria, cuando el vehículo en el que se trasladaba recibió unos 20 impactos de bala.
Según testigos, fueron los marinos quienes, por confusión, dispararon contra la camioneta Ford Lobo, con placas de Texas, en la que iba el comunicador, quien tenía una trayectoria de 15 años en el periodismo, en los que cubrió la fuente policiaca para los rotativos El Bravo, El Mañana de Matamoros y Contacto.
El agente del Ministerio Público, Miguel Ángel Ríos, dio fe de lo ocurrido en la colonia Mariano Matamoros, de esta población, hasta donde llegaron integrantes de la Marina, policías federales y estatales.
En semanas recientes Guajardo Romero, integrante de la Asociación de Periodistas de Matamoros, documentó el abuso de militares contra ciudadanos. Le sobreviven su esposa y tres hijos.
Versión oficial
La Secretaría de la Defensa Nacional informó que “a las 11 horas, personal de la Octava Zona Militar, con sede en Matamoros, fue agredido con disparos de armas de fuego, por un grupo de individuos que viajaban en ocho vehículos, por lo que repelieron la agresión
, y como saldo de estos hechos murió un soldado y dos más resultaron heridos.
Refirió que en las inmediaciones del lugar
también se localizó dentro de una camioneta el cadáver de Guajardo, sin precisar si fue víctima de un fuego cruzado o de balas disparadas por sus efectivos, pero señaló que las procuraduría de Justicia Militar, General de la República y de Justicia de Tamaulipas realizarán las investigaciones correspondientes.
La dependencia ofreció sus condolencias a los familiares del soldado y del periodista, quienes perdieron la vida en el cumplimiento de su deber
. Los restos de Guajardo serán sepultados este sábado en una ceremonia privada.
En una década, ocho periodistas han sido asesinados en Tamaulipas. Matamoros ocupa el primer lugar en la lista, con los homicidios de Pablo Pineda, fotógrafo de El Mañana de Matamoros; Saúl Martínez, editor del vespertino Imparcial y Francisco Arratia, columnista de Contacto.