La iniciativa presidencial para establecer el mando único policiaco en cada estado de la República es inviable mientras no se depuren las corporaciones responsables de la seguridad pública, que están infiltradas por el crimen organizado, advirtieron senadores de PAN, PRD y PT, para quienes el secuestro y ejecución del hermano de Patricia González, ex procuradora de Justicia de Chihuahua, es prueba del riesgo que implica la reforma de Felipe Calderón.

El senador panista por Chihuahua, Ramón Galindo; el coordinador del PT, Ricardo Monreal, y el perredista Tomás Torres coincidieron en que no puede centralizarse el mando de los cuerpos de seguridad en policías estatales, que participan en secuestros y en la protección de las bandas del narcotráfico.

“¿Qué puede esperar el ciudadano común, cuando hay señalamientos de funcionarios de altísimo nivel, como el de Patricia González, sobre el involucramiento de policías del actual gobierno del estado en el crimen de su hermano? –preguntó Galindo.

Ex presidente municipal de Ciudad Juárez, dijo que el daño es estructural y el reto es depurar y modernizar a todas las policías, comenzando por la federal, ya que de otra forma no se podrá avanzar en el combate a la delincuencia organizada.

Por separado, Monreal recalcó que el primer paso que debió dar el gobierno de Felipe Calderón es limpiar las corporaciones, ya que es imposible frenar la criminalidad con el enemigo adentro. Recalcó que el poder corruptor de las bandas del narcotráfico es tan enorme que la mitad de los policías del país están coptados por el crimen organizado.

“Es muy grave lo que pasó en Chihuahua –el secuestro y asesinato de Mario González – a manos de quienes eran responsables de su seguridad y la de los demás ciudadanos, pero que en realidad estaban incorporados a la nómina del crimen organizado.”

Monreal insistió en que este hecho es otro elemento que los senadores deben valorar al dictaminar la reforma constitucional por la que se pretende establecer el mando único. Muchos de los senadores que en principio habían opinado positivamente en torno a esa iniciativa, ahora lo están pensando con mucha seriedad, porque no sólo implica riesgos dar tanto poder a los gobernadores, sino también el centralizar las funciones de seguridad pública en corporaciones corruptas.

A su vez, Tomás Torres expuso que la propuesta presidencial debe ser modificada a fondo, ya que, de entrada, no se requiere reformar el artículo 115 de la Constitución, toda vez que en el mismo se establece ya cómo puede establecerse por convenio el mando único, a petición expresa de algún municipio o estado.

Coincidió en que es urgente depurar las corporaciones policiacas, ya que de hecho es el primer paso que el gobierno federal debió dar, antes incluso de involucrar al Ejército en el combate al narcotráfico.

Lo que está pasando en Chihuahua y en muchas otras entidades, además de agraviar a la sociedad, está provocando una enorme desconfianza hacia las autoridades; no se salva ninguna, por eso hay que depurar a todas las policías, insistió el senador Galindo.