El titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso), Heriberto Félix Guerra, anunció que con el apoyo de los bancos de alimentos se podrá ayudar a uno de cada cinco mexicanos que viven en pobreza alimentaria, y rechazó que esta sea una política asistencialista, hay que saber lo que es el hambre para opinar.

Explicó que los bancos de alimentos se han comprometido a duplicar el trabajo que realizan, y que con el apoyo de organismos empresariales, de las tiendas Diconsa y Liconsa se va a crear una red que permitirá que la canasta básica tenga para la población en pobreza alimentaria un costo de entre 2 mil y 2 mil 500 pesos, en lugar de los 3 mil 500 pesos que actualmente tiene.

La meta para acabar con la pobreza alimentaria, en la que hasta 2008 había unos 19 millones de personas, se puede lograr en cinco años con esas medidas, dijo el funcionario en entrevista en el Senado. Al interrogarlo sobre si es una política asistencialista, respondió que “no, yo le diría si usted ha padecido el hambre. Hay que saber lo que es el hambre para poder opinar. En todo el mundo hay pobreza, hasta en Estados Unidos.

Escucho los planteamientos que dicen que son programas asistencialistas, vengo del sector productivo. Son programas que tienen que ver con igualar las capacidades en el país, es importante que a quien tenga hambre lo apoyemos para que pueda comer. El hambre tiene repercusiones en educación, un niño que no se nutre bien tiene daños irreversibles de salud mental, que le van a propiciar que no tenga la retención para estar en la escuela, indicó.

Félix Guerra dijo que se desperdician unas 30 mil toneladas de alimento al día. No es sólo llevar el pescado, sino enseñar a pescar. Por eso hablamos de un plan que incluya educación, salud, alimentación, vivienda e ingresos.