Ulises Ruiz pidió a consejeros estatales y diputados priístas que la decisión sea unánime
Al ex gobernador se le acusa de apoyar a Gabino Cué, candidato de la oposición
Viernes 26 de noviembre de 2010, p. 13
El consejo político del comité estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Oaxaca expulsará de sus filas este sábado ex gobernador José Murat Casab. Los priístas lo responsabilizan de la derrota electoral del pasado mes de julio y de favorecer a Gabino Cué Monteagudo.
Diputados priístas revelaron que el gobernador Ulises Ruiz, quien dejará el poder la próxima semana, les pidió concentrarse en la capital del estado, al igual que a todos los consejeros estatales, para asegurar que la expulsión se dé de manera unánime y no haya lugar a dudas de la determinación que se asume.
Una vez que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) desechó el recurso de defensa de Murat, quien impugnó la integración de la comisión nacional de justicia partidaria del PRI porque al momento de recibir la solicitud de expulsión se encontraba mal conformada, ni acreditó la militancia priísta de Nabor López García, quien fue la persona que inició el proceso en su contra.
Una vez que el tribunal descalificó los argumentos de Murat, el gobernador saliente, Ulises Ruiz Ortiz, ordenó a los diputados federales que por ningún motivo se ausenten de la reunión del consejo político. “El góber (Ulises Ruiz) nos pidió que no faltemos, porque quiere que sea la última gran decisión política en su sexenio, y dar un escarmiento a Murat”, dijo uno de los diputados, quien solicitó el anonimato.
Hace dos meses y medio la comisión de honor y justicia del PRI inició el proceso de expulsión contra Murat por su presunto respaldo a la campaña de la coalición opositora para la gubernatura de Oaxaca, que encabezó Gabino Cué. El ex gobernador la emprendió contra la dirigencia nacional priísta, encabezada por Beatriz Paredes Rangel, al acusarla de buscar chivos expiatorios de las derrotas en Oaxaca, Puebla y Sinaloa.
La solicitud la inició Nabor López García, quien se dijo consejero suplente del consejo político nacional del PRI. Tal hecho fue rechazado por Murat, porque atentaba contra sus derechos político-electorales.
Entonces advirtió que la maniobra tenía el aval de la presidenta priísta, Beatriz Paredes. Seguimos siendo un partido a la vieja usanza, que toma decisiones en la cúpula, entre cuatro o cinco que asumen actitudes de venganza cuando hay opiniones distintas a las de Beatriz Paredes, y entonces se inicia la persecución de los militantes
, manifestó.