Se agrede a niñas o niños que no cumplen estereotipos: encuesta
Lunes 29 de noviembre de 2010, p. 46
Con la finalidad de prevenir, atender y eliminar distintas formas de violencia en la escuela, la Secretaría de Educación Pública (SEP) propone a los maestros que apliquen en su grupo y centros escolares encuestas y entrevistas para identificar entre el alumnado diferentes grados, intensidades y formas de violencia presentes en la comunidad, que en años recientes se ha incrementado de manera importante.
En el libro Equidad de género y prevención de la violencia en primaria, del cual se distribuirán en las próximas semanas 695 mil ejemplares a docentes de grupo, la dependencia advierte que esta violencia y discriminación se da también en las aulas, cuando el castigo es diferenciado entre alumnos y alumnas, y se presenta cuando los niños excluyen a las niñas de sus juegos, cuando se ridiculiza a alguien y adquiere formas más graves aun cuando se da frente a todo el grupo, o incluso cuando no se reconocen como violentos, sino casi naturales
, ciertos actos que sí lo son.
El texto da varios ejemplos de prácticas cotidianas en los planteles escolares que muchas veces pasan desapercibidas como ejemplos de división sexual y genérica de los espacios en la escuela. Entre ellas cita que los patios principales o de deportes sean ocupados generalmente para los juegos de los varones, mientras las niñas permanecen en el salón de clases. O incluso, cuando se forman filas separadas de niños y niñas.
Elaborado por la SEP, con la colaboración del Programa Universitario de Estudios de Género de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el texto es un material de apoyo dirigido al personal docente que trabaja frente a grupo en escuelas primarias del país.
El año pasado, también con apoyo de la UNAM, se elaboró el libro dirigido a planteles de prescolar, y está en proceso la edición para escuelas de nivel secundaria.
El texto pretende dar al profesorado de nivel primaria la información y los conocimientos que le permitan desarrollar las capacidades necesarias para impartir una educación que favorezca la equidad entre hombres y mujeres, con la finalidad de modificar los modelos de conductas sociales y culturales que implican prejuicios y que se basan en la idea de inferioridad o superioridad de uno de los sexos.
La introducción da cuenta de la gravedad del fenómeno que se presenta en las escuelas de educación básica, donde una quinta parte del alumnado de cuarto y quinto grados de primaria reportó que se ha llegado a agredir de diversas maneras a los niños que no cumplen con el estereotipo masculino.
En el caso de las niñas, una cuarta parte señaló que se han dado situaciones de ataque, incluso físico, a compañeras que tampoco cumplen con el estereotipo femenino. Pero, además, con la complacencia de los docentes y directivos, muchas veces derivada de la falta de conocimiento o capacitación.
Por ello, mediante el análisis de los libros de texto gratuitos, la formación continua del personal docente, estudios, campañas de sensibilización y trabajo con adolescentes y jóvenes se busca deconstruir
los estereotipos y roles sociales que perpetúan la desigualdad entre mujeres y hombre, además de visibilizar y desnaturalizar la discriminación y la violencia de género.
En esta labor, la escuela tiene un papel fundamental en la conformación de lo masculino y lo femenino, ya que es uno de los espacios donde se refuerzan, fomentan y mantienen valores y pautas de comportamiento socialmente aceptados.
Incorporar la perspectiva de género es la mejor alternativa para inculcar pautas de convivencia que contribuyen a la erradicación de la violencia, señala el texto presentado hace unas semanas.
El libro consta de ocho unidades dedicadas a un tema que favorece la comprensión y el análisis de la violencia desde la perspectiva de género; contiene conceptos claves para identificar prácticas sexistas, discriminatorias y violentas dentro del ámbito educativo, pero además plantea sugerencias para modificar estas prácticas, mediante reflexiones y ejercicios para el alumnado.