Presenta la exposición conmemorativa Episodios de la historia de México
Exhibe originales y réplicas de documentos alusivos a la Independencia y la Revolución
Miércoles 1º de diciembre de 2010, p. 4
Un recorrido por la historia y el acontecer político, social y cultural de México es el que presenta el Museo del Bicentenario, inusitado espacio cultural que abrió sus puertas en el piso 36 de la Torre Latinoamericana, a propósito de las efemérides centenarias.
El nuevo recinto, fundado por Rodrigo Amerlinck –presidente del consejo de administración de Inmobiliaria Torre Latinoamericana–, se ubica en el piso 36 de esa edificación; tiene seis salas y abrió sus puertas el pasado 12 de octubre con la muestra permanente Episodios de la historia de México.
El Museo del Bicentenario, que se puede visitar los 365 días del año, exhibe originales y réplicas de documentos, además de mapas, fotografías y objetos que se remontan a la época independentista y de la Revolución.
También ofrece una muestra de los billetes emitidos por las distintas facciones revolucionarias y una película con escenas de la Revolución, proporcionada por la Filmoteca de la Universidad Nacional Autónoma de México.
El recorrido se inicia en una sala dedicada al comercio entre la Nueva España con Filipinas, Centro y Sudamérica, e incluye una pequeña réplica de un bergantín, que recuerda a los galeones que hicieron la ruta del Pacífico durante 250 años.
Posteriormente, el visitante podrá observar piezas relacionadas con la guerra de Independencia y capítulos dedicados a Hidalgo, Allende y Morelos. Además, se documenta el origen del uniforme de Morelos, con el que se retrató en Oaxaca en enero de 1813, el cual se exhibe en el Palacio Nacional y perteneció al capitán general de Guatemala, don Antonio González Saravia.
En el discurso museográfico se observa un mapa del México independiente, en el cual el país abarcaba desde Colombia hasta Oregon, en Estados Unidos. El área de Centroamérica se perdió al caer el imperio de Iturbide, pero se recuperó pronto hasta Chiapas. Mientras en el norte se perdió territorio entre 1830 y 1840. Asimismo, hay un mapa que documenta la invasión estadunidense y la pérdida de más de la mitad del territorio.
Entre otras piezas que narran esa época figuran decretos, fotografías y firmas originales de varios personajes, además del Plan de Iguala, el Acta de Independencia, un retrato poco conocido de Agustín de Iturbide, vestido de emperador, además de un documento que exhibe el parentesco entre Iturbide y Miguel Hidalgo, descendientes del conquistador don Juan de Villaseñor.
Tampoco faltan los símbolos masónicos, un delantal, una banda y un collar del grado 33 bordados en seda con hilos de oro, que se supone pertenecieron a alguno de los personajes que rigieron la política mexicana durante siglo XIX.
En otro rubro se exhiben síntesis históricas de los principales gobernantes del siglo XIX, desde Guadalupe Victoria hasta Porfirio Díaz.
Decena Trágica
Durante el recorrido se observa una vitrina con objetos alusivos a los fastos del centenario, como fotografías de monumentos e inauguraciones, incluida una imagen de la construcción del Ángel de la Independencia, postales, invitaciones, medallas y monedas conmemorativas.
Y para recrear esa época se colocó una oficina del porfiriato, con muebles originales, un escritorio de cortina con todos sus accesorios y piezas de las que se usaban entonces, como tintero, plumillas, pesacartas, sello de lacre, paragüero, reloj, escupideras, una bandera y retratos originales de personajes del siglo XIX.
En otra área se montó una figura, cortesía del Museo de Cera de la Ciudad de México, la cual representa a un coronel de artillería, quien usa un casco prusiano Pickelhaube, original del ejército porfirista, con su penacho de crin. Los botones, cinturón, banda y espada son originales.
También en el museo, situado un piso abajo del mirador de la Torre Latinoamericana, se exhiben testimonios de la última relección de Díaz, así como de la campaña democrática de Francisco I. Madero y su exilio en San Antonio, Texas. El Plan de San Luis y otros documentos sobre el inicio de la Revolución, además de fotografías y periódicos de la batalla de Ciudad Juárez y de la presidencia de Madero.
El apartado de la Decena Trágica incluye una serie de fotografías captadas la mañana del nueve de febrero de 1913 en el Zócalo, así como la llegada de Madero a caballo, su posterior asesinato, la intervención del embajador Wilson y la usurpación de Victoriano Huerta.
El horario para visitar el Museo del Bicentenario es de 9 de la mañana a 10 de la noche. El costo de la entrada es de 20 pesos por adulto y 10 para niños y personas con discapacidad. Se ofrecen descuentos para grupos.