Ciudad Juárez, Chih., 3 de diciembre. El éxodo más publicitado ha sido el de mil 500 veracruzanos avecindados en esta ciudad, conocidos como juarochos, quienes entre marzo y noviembre pasados regresaron a su estado natal por los altos índices de inseguridad y crecimiento del desempleo; sin embargo, no sólo ellos se han ido. De las 473 mil viviendas que hay en esta localidad fronteriza, 75 mil 868 se encuentran deshabitadas, es decir, un 16.14 por ciento, según un estudio de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ).

Las causas principales por las que en los recientes tres años se ha incrementado el número de casas desocupadas son la inseguridad y violencia de la región, así como la crisis económica. Esto ha provocado que una de cada seis viviendas esté vacía.

Del total de las casas habitación, 43 mil están deshabitadas, pero cuentan con servicios de agua potable, energía eléctrica o gas natural, por lo que sus propietarios, quienes ya no viven en ellas, las ofrecen en renta o venta.

El estudio de académicos del Instituto de Ciencias Sociales y Administración de la UACJ reveló que 32 mil 868 viviendas se encuentran en completo abandono, principalmente por la inseguridad que priva en la región y la falta de empleos de los dueños de los inmuebles, quienes optaron por irse de la ciudad en forma definitiva, con todo y su familia. Son casas con grafitis, desvencijadas y muchas de éstas se localizan en el viejo centro histórico de la ciudad.

La investigadora María del Socorro Velázquez Vélez, quien estuvo al frente del equipo de académicos de la UACJ que realizaron el sondeo, manifestó que la finalidad de éste es contar con datos reales de las casas desocupadas, pues se habían manejado cifras de entre 15 mil y 116 mil, lo que en su opinión afecta las inversiones en Juárez y su imagen.

Precisó que 57.2 por ciento de las casas deshabitadas se localizan en la zona suroriente de la demarcación, con alrededor de 33 mil viviendas; 33 por ciento en el norponiente y el resto en otros sectores.

Comentó que espera que autoridades municipales y los constructores de viviendas consideren los resultados del estudio –que comenzó en julio de 2009– y tomen las medidas necesarias, ya que la mayoría de estas casas han sido desmanteladas y en muchos de los casos utilizadas como refugio de delincuentes.

El 31 de marzo pasado, un primer grupo de 300 juarochos regresó a Veracruz en dos vuelos fletados por el gobierno de la referida entidad. La mayoría perdieron sus trabajos en maquiladoras y se fueron por temor a los asaltos, extorsiones, homicidios y secuestros en la ciudad fronteriza.

En ese entonces, una retornada, Rosa Carmina, comentó que regresar a suelo veracruzano luego de 10 años de vivir en Juárez le causó sentimientos encontrados. Nos costó mucho trabajo tomar la decisión de irnos, pero la vida que estábamos haciendo aquí ya era de temor, con balazos y mucha violencia. Nuestra vida diaria aquí eran puras muertes, señaló.

A pesar de que según la investigación de la UACJ, una de cada seis casas en Ciudad Juárez se encuentra deshabitada, el gobierno federal y el ayuntamiento local proyectan para 2011 la construcción de 249 casas para familias de escasos recursos económicos, con una inversión de 20 millones de pesos, informó Vicente López, el director de Desarrollo Urbano municipal.

Vamos a explorar las opciones que nos ofrecen para construir viviendas, básicamente para personas de escasos recursos o asentadas en zonas de alto riesgo, mencionó luego de una reunión con autoridades federales.

Expuso que la Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra (Corett) planteó edificar las casas en el poblado rural de Tres Jacales, ubicado en el Valle de Juárez, a más de 25 kilómetros de Ciudad Juárez, porque, subrayó, es donde ese organismo tiene terrenos disponibles.

Derivado de lo anterior vamos a explorar qué otra opción existe en el municipio para reubicar a estas familias; a nosotros nos gustaría obviamente que fuera aquí, en los límites de la ciudad, concluyó Vicente López.