El ex dirigente nacional del PAN, Manuel Espino, denunció que ha sido víctima de espionaje político, pero no se dejará intimidar y acudirá hoy –como consejero vitalicio que es– a la reunión en que se elegirá al nuevo presidente de Acción Nacional.

Espino detalló que de forma anónima le hicieron llegar la grabación de una plática entre una de sus colaboradoras y Eduardo Salas González, miembro de la Comisión de Orden del PAN, que también ha sido difundida en Internet.

Deploro tajantemente este intento anónimo de intimidar a mis colaboradores, tratan de intimidarnos con prepotencia al mostrar que nuestras conversaciones están intervenidas, recalcó.

Expuso que le indignó y dio tristeza escuchar a Salas reconocer que fue presionado por miembros de la Comisión de Orden del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), como por integrantes de la Comisión de Orden del estado de México, para que votara por su expulsión.

Esa grabación ilegal prueba, recalcó, que no enfrentó un proceso justo, sino un juicio sumario. Agregó que a esa infamia se suman los infundios de César Nava, quien un día antes, durante una reunión con los senadores del PAN, sostuvo que lo expulsaron por apoyar a otro partido.

Retó a Nava a probar tal aseveración, aunque, expuso, sabe que no lo hará, porque es congruente con las prácticas del secreto y en engaño.

Manuel Espino reiteró que se siente orgulloso de su paso por la dirigencia blanquiazul, porque no lo han acusado de enriquecimiento inexplicable, nepotismo o ejercer funciones injerencistas. Dijo que él no ha firmado pactos a espaldas del partido, no lo señalan por vínculos con el crimen organizado y tampoco ha comprado departamentos millonarios.

No me detendrá el espionaje, venga de donde venga, tampoco una campaña negra.