Aunque el Instituto Federal Electoral (IFE) prevé la desaparición del Comité Nacional de Supervisión y Evaluación (Conase), órgano técnico de la Comisión Nacional de Vigilancia (CNV) del Registro Federal de Electores, para el próximo lunes, los representantes partidistas de esa comisión enviaron un posicionamiento de rechazo a la pretensión de los consejeros. La propuesta –dicen– tiene un carácter eminentemente limitativo, restringido, incompleto, sesgado y regresivo en cuanto a las funciones de supervisión y vigilancia, por lo que consideramos que se trata de una contrarreforma.

En un documento de 12 cuartillas avalado por los representantes en pleno ante la CNV se descalifica la facultad para desaparecer al Conase y sostiene que si bien el Consejo General del IFE tiene facultades para crear o suprimir órganos del IFE, lo debe hacer sobre la base de la debida motivación y fundamentación, por lo que la modificación o extinción, del órgano técnico-auxiliar de la CNV no puede hacerse únicamente porque se tienen facultades para ello, sino en virtud de una amplia reflexión sobre el papel que juega como órgano que permite a la CNV cumplir con sus atribuciones.

Sin embargo, en el fondo de la oposición de los partidos a la modificación se encuentran las enormes partidas que eroga el IFE a ese órgano no sólo por concepto de nómina –que en muchos casos duplican los salarios con lo que cobran por representar además al partido en la CNV–, sino también por la entrega de viáticos, pago de trabajos en campo.

Paralelamente, algunos representantes cobran, además de sus salarios como dobles representantes ante la CNV y el Conase, en otros cargos. Así, a costa del erario el petista Pedro Vázquez González recibe 80 mil pesos por sus dos trabajos en la vigilancia del padrón, cargos que le dejan el tiempo suficiente para desempeñarse además como coordinador del PT en San Lázaro, con el consiguiente salario extra por esa función.

El representante de Nueva Alianza, Luis Antonio González –que percibe 40 mil pesos en el IFE por la doble representación, que equivale en realidad a un salario– se da tiempo para ser legislador en el estado de México.

Pese a la multiplicación de funciones que muchos representantes tienen y el doble salario de casi todos los representantes, se emitió el pronunciamiento para que se evitara la eliminación o modificación del Conase, en el que se asegura que todos los recursos públicos destinados a las representaciones acreditadas ante la CNV y su órgano auxiliar se ejercen en estricto apego a los lineamientos para otorgar por parte del IFE apoyos a los órganos de Vigilancia y al Conse, aprobados por la Junta General Ejecutiva

Critican que la creación de grupos de trabajo –en sustitución del Conase, como propone el IFE– contribuya a subsanar la ineficacia en que operan estos grupos de vigilancia, pues la ineficacia del órgano no está en su integración, sino en los mecanismos de la autoridad electoral para procesar los acuerdos.